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LÍDER. Tavares realizó un gran partido en el que los de Keymare rozaron la victoria. /IDEAL
Remontada sin premio
LIGA ASOBAL

Remontada sin premio

Keymare agrava su calvario a pesar de plantar cara en pista de Pilotes Tavares jugó un partidazo, pero no fue suficiente para el triunfo

VÍCTOR J. HDEZ. BRU

Domingo, 16 de marzo 2008, 04:36

No pudo debutar con victoria Guillermo Plaza, en su reencuentro con el banquillo de Keymare Almería. El técnico almeriense volvía a dirigir al equipo de toda su vida, en un partido en el que éste se empezaba a jugar 'media vida', media permanencia en la Liga Asobal.

Y no le salieron las cosas como él hubiera querido, al menos en el resultado final. Los naranjas estuvieron metidos en el encuentro de principio a fin, con altibajos tal y como les ha caracterizado en toda la temporada, pero en disposición siempre de puntuar.

Sin embargo, en el último minuto, un gol fatídico, para los intereses almerienses, por parte del extremo Cerillo, dejó con la miel en los labios a un Keymare que parecía en disposición de sumar al menos un punto.

Una derrota que vuelve a colocar al borde del precipicio al conjunto almeriense, que el miércoles por la noche recibe a Algeciras en el Municipal Rafael Florido, en un encuentro en el que una derrota puede equivaler ya casi una condena y una victoria un chorro de esperanza.

Mal primer tiempo

Sin duda, lo peor del encuentro, el lastre que luego fue imposible superar, fue la primera parte de Keymare Almería.

El conjunto almeriense había salido bien a pista y se colocaba con 0-2 en el marcador. Sin embargo, ahí se atascaron las ideas de los de Plaza, que pronto se vieron superados en el marcador y, en el minuto 15, ya perdían por cuatro goles (11-7), evidenciando problemas en ataque y aún más en defensa, con una portería que prácticamente no intervino positivamente, con Francis Miras, en todo el primer tiempo.

Con esos parámetros, tras el parcial de 5-0 a favor de los locales y los enormes problemas para superar la defensa 5-1 gallega, aparecieron los dos zurdos, Petric y sobre todo Tavares, que jugó uno de sus mejores partidos desde que viste la camiseta de Keymare Almería y que terminó el choque con diez goles.

Ellos fueron los responsables de que la hemorragia que sufría su equipo no fuese mortal en la primera parte del choque. Su aportación en ataque hizo que las cosas, al descanso, se quedaran en 19-14, una diferencia muy amplia para los gallegos, pero que al menos no dejaba el partido sentenciado todavía.

Amplia mejoría

Varios aspectos mejoraron en el cuadro almeriense a la vuelta del descanso. Para empezar, la defensa estuvo bastante más seria y sólida; además, mejoró el juego colectivo en ataque; y sobre todo funcionó la portería, ya con Vladimir Perisic.

Así, llegó el recorte de la diferencia, que en un primer estirón visitante se colocó en 25-22, con tavares haciendo de las suyas y liderando el ataque del conjunto almeriense.

Incluso llegó el tiempo muerto del equipo local, que veía cómo la diferencia que antes parecía definitiva empezaba a decrecer de forma peligrosa, poniendo incluso en entredicho la victoria.

No fue suficiente, puesto que continuó la remontada que, de no ser por la efectividad del croata Prce, que como Tavares, también alcanzó la decena de goles, posiblemente hubiera llegado a servir para sumar al menos un punto para el conjunto almeriense.

Los almerienses deben quedarse ahora con la parte moral de la derrota, la que habla de un equipo que plantó cara a su rival.

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