Keymare recupera los puntos perdidos en casa

Flotaba en el ambiente que la mejora manera de olvidar la derrota casera del pasado martes no era otra que vencer en Altea. Y así fue. Keymare fue más práctico ayer que el martes, aguantó bien todo el partido, en el que incluso llegó a mandar durante la mayor parte de los minutos, aunque al descanso perdía por dos (16-14), y sobre todo al final supo templar mejor los nervios.

El cuadro de Alejandro López hizo un buen partido en ataque, con Marc García, un hombre teóricamente fichado para defender, como el máximo anotador con ocho tantos, incluyendo un penalti tan decisivo que fue el último gol de un partido que se desequilibró por un único tanto.

El catalán no sólo defendió bien, sino que fue el máximo anotador de su equipo y no lo fue del encuentro porque el alteano Buchmann se fue a la decena de tantos, en un gran partido, mientras que, también en las filas locales el pivote Manolo Colón, fichaje estrella de Javier Cabanas para esta temporada, también llegó a los ocho.

En cuanto al desarrollo del juego, el cuadro almeriense mandó durante gran parte de la primera mitad, llegando a disponer de tres goles a su favor, aunque en la recta final, de ese primer tiempo, como ya le sucedió el pasado martes en casa ante Granollers, se desinfló y se marchó a la caseta con dos abajo (16-14).

Sin duda que, en ese período de reflexión, el técnico gallego del equipo almeriense debió recordar a los suyos que no se podía repetir la misma experiencia que cuatro días antes y sus jugadores le hicieron caso.

Los almerienses, eso sí, le pusieron intriga, porque en la segunda mitad tanto fueron capaces de marchar arriba como abajo, con infinitesimales ventajas de únicamente un gol para uno y otro bando y con un encuentro realmente de infarto.

Con menos de un minuto, Pejanovic detuvo un penalti de Altea, mientras que acto seguido Marc García convertía el suyo.