Vícar Goya Koppert cae en errores pasados y pierde en casa ante BM Alcobendas

Vícar Goya Koppert perdió ayer un importante partido ante un rival directo en la lucha por la permanencia, BM Alcobendas, que le precedía en la clasificación, con una ventaja de cuatro puntos, que ahora se han convertido en seis y el average particular, ganado por las madrileñas.

Las vicarias han sido víctimas de errores antiguos. Han comenzado con acierto, pero después, se han mostrado nerviosas, imprecisas en ataque, parcela en la que han perdido numerosos balones, y no han conseguido defender con la eficacia de costumbre ante un rival que sí evidenciaba un gran acierto en la ofensiva y una aguerrida defensa.

Las locales comenzaban el encuentro a buen ritmo, sólidas en defensa y acertadas en ataque, conscientes de la trascendencia del partido, ante los dos difíciles compromisos que les aguardaban tras este choque.

No obstante, tras la ventaja inicial, las madrileñas han reaccionado y aprovechado unos minutos de acierto en ataque para igualar primero el marcador y después, en el minuto 15, ponerse por delante, con una ventaja que ha sido de dos goles en el 17.

En el minuto 19, Miguel Ángel Florido le ha pedido a Dorotha Skipor que comenzara a calentar, y, en el 24, ha conseguido su primer gol con la camiseta de Vícar Goya Koppert, tras haber reemplazado a Ana Petrinja.

No obstante, la irrupción en el juego de la primera línea polaca y el empate a 9 conseguido por Trini Cañellas no ha logrado detener la reacción del equipo madrileño, que se ha marchado en el marcador, incrementando progresivamente su ventaja hasta los cuatro goles (10-14). Las vicarias han logrado mejorar su defensa y cerrar el caudal visitante, pero no han conseguido mejorar un ataque que ha caído en antiguos errores y se ha mostrado muy impreciso.

Las madrileñas se han marchado al descanso con una ventaja de cuatro goles, 10-14.

Un equipo en racha

En el segundo tiempo, las madrileñas han salido a la cancha muy 'enchufadas' en ataque, con un gran porcentaje de acierto, mientras las de casa caían de nuevo en imprecisiones anteriores, con pérdidas de balón y lanzamientos en posiciones forzadas.

Las diferencias se han incrementado en el marcador, pese a que desde el banquillo, Miguel Ángel Florido lo intentaba todo, con cambios en la portería, en la formación y en los sistemas, pero sin éxito.

El joven equipo madrileño se cargaba de moral y todo le salía bien, y se llevaba el triunfo.