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IDEAL GENTE
Domingo, 10 de abril 2016, 12:21
En una temporada que anuncia el regreso de los camisones y los pijamas a la escena urbana, los chavales parisinos han economizado recursos y fundido el calzoncillo y la camisa en una sola prenda de reciente creación: el calchemise, la camisa con calzoncillo incorporado. Un verdadero 2x1 que causa furor en la capital de la moda mundial, donde se ha convertido en un inmediato top ventas.
El autor de esta atrevida prenda, cuyo nombre surge de la fusión de caleçon (calzoncillo) y chemise (camisa), es Simon Fréour. El ingeniero ha reparado más en la funcionalidad que en el estilo al eliminar la molesta goma del calzoncillo que tantos quebraderos de cabeza ocasiona cuando termina cediendo. Cuenta que ya vio hace años la necesidad de crear esta pieza para evitar que la camisa se moviera de sitio y asomara por encima del pantalón, evitando situaciones incómodas. Otra cuestión será si esta especie de mono masculino que recuerda a los bañadores de principios del siglo pasado se erige en el nuevo uniforme juvenil, que ha salido a la venta por entre 50 y 65 euros.
Los más arriesgados lo combinan con chaqueta, mocasines, calcetines, corbata y hasta con pajarita. Extravagancia disimulada. Así han bautizado los franceses al calchemise. La nueva revolución francesa, según Fréour, se adapta a todo los estilos : clásicos, elegantes, hipsters «La camisa tiene 5.000 años y era el momento de innovar», asegura Clément Walter, el otro ideólogo de un invento que se ignora si traspasará las fronteras galas.
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