Zújar reparte 13.500 roscas entre sus vecinos el día del Santo Ángel

Un año más cientos de zujareños participaron de la fiesta del Santo Ángel, cuya peculiaridad es el reparto de miles de roscas entre los vecinos. Ayer se repartieron 13.500 roscas del santo. La población de Zújar es de 2.800 habitantes y, aunque cada zujareño toca a casi 5 roscas por cabeza, en la práctica no sucede así. A cada persona se le suele entregar dos roscas, pero son innumerables las que piden varias más para los miembros de su familia que residen fuera del municipio y son tantos, que la cantidad de 13.500 roscas se queda a veces escasa o muy ajustada, cuando a priori deberían de sobrar. Este año según informa a IDEAL el concejal de Fiestas se encargaron 1.500 roscas más que el año pasado, para que nadie se quedara sin la popular rosca del santo.

La fiesta se inicia con una misa en honor al Santo Ángel cuya imagen es sacada en procesión por las principales calles del la localidad, partiendo desde la iglesia parroquial. Una vez acabado el desfile, el cura párroco bendice las miles de roscas que se encuentra en el edificio de la comunidad de regantes y, desde hace unos años, también sede del Centro Guadalinfo.

Tradición o leyenda

La fiesta del Santo Ángel es la festividad cristiana más antigua de todas las que se celebran en Zújar. Una tradición que arranca en el siglo XVII.

Cuenta la leyenda que tras el paso de una plaga de langostas que arrasó el municipio, y lógicamente las cosechas, los vecinos se solidarizaron con los que no tenían ni para comer y salieron a pedir harina para hacer roscas de pan y repartirlas entre los más necesitados que eran muchos. Ahora ya no se pide harina, pero unas semanas antes de la festividad un grupo de voluntarios recorre el pueblo pidiendo dinero para poder comprar las roscas. Si falta, que suele faltar, el Ayuntamiento pone la cantidad necesaria hasta cubrir el gasto.