Un adolescente obliga a su madre a punta de navaja a conducirlo a un piso para quemarlo

Un adolescente de 17 años fue detenido la tarde del lunes por la Policía Local de Granada acusado de un delito de maltrato en el ámbito familiar, en este caso, dirigido contra su madre. El menor fue presentado ante la Policía Nacional, que instruyó las correspondientes diligencias antes de ponerlo a disposición judicial. Todo comenzó en la localidad de Ogíjares, donde el menor esgrimió una navaja de diez centímetros de hoja para obligar a su madre a conducirlo en un turismo hasta una vivienda de la Chana que el menor quería quemar.

Antes de emprender el camino sobre las 19 horas, el adolescente cargó en el maletero un bidón de diez litros lleno hasta la mitad de gasolina; una pistola de plástico cargada de combustible; así como un revólver detonador de juguete; 21 discos detonadores de pólvora y un mechero. La madre tomó el asiento del conductor y el menor iba de copiloto con la navaja abierta amenazando a la progenitora con el arma blanca a la altura del costado.

La sala del 092 de Policía Nacional fue la que dio aviso por radio del turismo que se dirigía a la Chana desde Ogíjares. Y fue en una salida de la A-44 a la entrada en la ciudad cuando una patrulla de la Policía Local se percató de la presencia del automóvil y decidió darle el alto.

Cuando los agentes de la Policía Local interceptaron el vehículo se encontraron al menor empuñando la navaja contra la madre en el asiento anexo al del conductor. Los agentes, tratando de calmar al adolescente, le pidieron que cerrara la navaja y la entregara para evitar males mayores. El menor no opuso ningún tipo de resistencia y decidió cerrar la hoja de la navaja, momento que los agentes aprovecharon para arrestarlo. Acto seguido, abrieron el maletero y encontraron los productos citados anteriormente, los cuales iban a ser utilizados, presuntamente, para prender fuego a la vivienda de la Chana tal y como el menor había expresado a su progenitora.

La madre manifestó a los policías locales que su hijo la había amenazado con rajarla si no accedía a llevarlo hasta la vivienda de la barriada granadina. La víctima se vio obligada a entrar en el coche para traer a su hijo a la capital. Durante los siete u ocho kilómetros del trayecto, el menor no dejó de reiterar su intención de prender fuego a la vivienda de la Chana que, al parecer, se trata de un piso de acogida. Por suerte, fue interceptado a tiempo de ejecutar sus presuntos planes y así los agentes evitaron un desastre que nadie sabe cómo habría podido terminar en el hipotético caso de que lo hubiera consumado.

Los agentes de la Policía Local informaron al menor del delito que había cometido, le leyeron sus derechos y lo detuvieron. Posteriormente lo trasladaron a la comisaría provincial de la Policía Nacional, en la calle La Palmita, junto al resto de objetos que le incautaron, como la navaja, las dos pistolas simuladas, el bidón con gasolina, así como los discos detonadores de pólvora que portaba en el maletero.

El adolescente detenido fue entregado a la Policía Nacional y posteriormente fue puesto a disposición de la Fiscalía de Menores de Granada.

Números alarmantes

Una estadística de la Fiscalía de Menores de Granada apunta a que en 2014, el ministerio público -que, en los casos de menores, es la institución que instruye los procedimientos- investigó a 72 adolescentes de entre 14 y 17 años por violencia o maltrato familiar, y el 62% de ellos presentaba problemas de salud mental. De hecho, la pena que se impuso al 55% de estos últimos consistió en someterse a tratamiento psicológico o psiquiátrico.

Y en cuanto a 2015 los números están avanzando a un ritmo todavía más rápido. En los cuatro primeros meses de este año, la Fiscalía de Menores de Granada ya ha registrado 34 casos de maltrato a los padres, y el 50% de los muchachos encausados por esta razón tenían problemas mentales.