"No es un caso de corrupción, es una cuestión administrativa"

La inestabilidad ha vuelto al Ayuntamiento de Granada por circunstancias externas. Y lo hace en un momento clave: la semana en la que el gobierno municipal debe sacar adelante las ordenanzas fiscales para 2017; el armazón de los presupuestos. El PSOE afronta este escenario en minoría y con el apoyo de Ciudadanos en entredicho.

Este lunes se conoció que un juzgado de Sevilla ha llamado a declarar a Paco Cuenca en calidad de investigado por un presunto delito de usurpación de funciones públicas en su etapa como delegado de la Junta, entre 2010 y 2011. En la misma situación están otros antiguos compañero del ahora alcalde de Granada en el gobierno andaluz y la supuesta actuación irregular habría consistido en contratar a personal externo para realizar funciones que, en teoría, tendrían que hacer funcionarios de la administración. Cuenca compareció este martes para ofrecer explicaciones aunque confía en que el caso se archive pronto.

También este lunes, en un plano distinto, la pinza de PP y Ciudadanos presionó al PSOE. En esta ocasión, a propósito de la presunta frase jocosa -o de tintes machistas- que el actual jefe de la Policía Local habría dirigido a María Francés. Tanto PP como Ciudadanos quieren que la concejala Raquel Ruz asuma responsabilidades por la presunta ocultación del expediente reservado que se abrió para investigar lo sucedido; aunque no manejan la misma urgencia.

El PSOE encara una semana que acabará en un pleno, donde se vera la estabilidad del gobierno municipal.