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GRANADA

La Costa dice que sus proyectos no son «especulativos» El cambio de normativa deja en el aire una veintena de campos de golf en la provincia

Los site campos entre Motril, Almuñécar y .Salobreña preven cerca de 13.000 viviendas La Junta prevé aprobar antes de final de año un nuevo decreto más restrictivo y que limitará el número de viviendas alrededor de estas instalaciones deportivas.A pesar del gran número de proyectos anunciados, Obras Públicas sólo tiene constancia de cinco y únicamente está aprobado el de 'Guadix Golf'

M. NAVARRETE QUICO CHIRINO

Viernes, 15 de septiembre 2006, 05:18

Todos los planes de futuro desarrollo turístico de los municipios de la Costa Tropical tienen el golf como eje fundamental. Los ayuntamientos costeros se aferran a los campos de golf como reclamo para el turismo de calidad que busca la Costa Tropical y aseguran que lo suyo no será el típico 'jardincito' verde asfixiado de viviendas sino proyectos sólidos y serios fundamentales para crear una oferta alternativa de ocio.

Motril es sin duda la localidad que menos problemas va a tener para ver plasmado su proyecto golfístico en Playa Granada, ya que su campo está recogido en un Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) que, a diferencia de Salobreña y Almuñécar ya está aprobado y cuenta con todas las bendiciones de la Junta. El teniente alcalde de Urbanismo de Motril, Francisco Pérez Oliveros, recuerda además que el desarrollo turístico de Motril se basa en un modelo sostenible que ha elogiado el mismísimo Chaves. Por ello confían en ver pronto realizado el campo de golf 400.000 metros cuadrados en Playa Granada, que estará rodeado de un residencial y un hotel de golf. El problema del agua en la zona, según Francisco Pérez Oliveros, está resuelto ya que está previsto el abastecimiento con pozos.

En Salobreña no tienen las garantías motrileñas, pero el equipo de gobierno popular defiende su modelo de campo de golf «que no tiene nada que ver con proyectos especulativos». El PGOU salobreñero recoge dos campos, uno en los Palmares, en Lobres, y otro en el paraje Matagallares. «Son unos campos de golf novedosos de calidad y sin comparación en toda Andalucía. Están previstas diez viviendas por hectárea, una densidad bajísima y con una edificabilidad del 0,15», explica el alcalde en funciones, Juan de Dios Márquez. Además recuerda que «no se recalifican terrenos por recalificar» sino que conllevan unas cargas suplementarias altísimas para los inversores, que estarán obligados, por ejemplo, a construir dos grandes parques para Salobreña. Se prevé regar con agua residual.

Igual que en Almuñécar, que prevé depuradoras con sistema terciario para regar los cuatro campos de golf previstos en su PGOU. Éstos, sin duda, son los que más difícil lo van a tener. Y es que incluso antes de tener físicamente el plan, la Junta ya advirtió de que no hay suficiente agua. En el Ayuntamiento no se fían «ni un pelo» de los planes de la Junta, creen que los tratará con distinto rasero y defienden sus proyectos como base de su despegue turístico. Además critican que se demonicen los campos de golf, cuando presentan los estudios de recursos hídricos que garantizan su viabilidad. Los campos de golf fueron objeto este verano de discrepancias entre diversas consejerías de la Junta. Unas diferencias, que antes de que hicieran un hoyo en el seno del gobierno andaluz, las atajó el propio Manuel Chaves: «Un campo de golf no puede servir de excusa para hacer urbanizaciones». La Junta comenzó a gestar un nuevo decreto -mucho más restrictivo en el aspecto urbanístico- que, según fuentes próximas a la Consejería de Obras Públicas, verá la luz antes de final de año. En el texto participarán también las consejerías de Medio Ambiente y Turismo.

El consejero de Turismo, Paulino Plata, compareció el miércoles en el Parlamento sobre este asunto. Plata defendió la existencia de los campos de golf, subrayó la importancia de estos proyectos, pero también criticó que se supediten al ladrillo.

Tanta afición desmedida al palo y la pelotita ha hecho saltar la alarma en el seno de la Junta: no es explicable que un campo de golf con apenas unas decenas de socios puede estar rodeado de centenares de viviendas. Pero no siempre ocurre así. Los campos de golf han sido también una herramienta para traer lo que se denomina turismo de calidad. Esas mismas instalaciones que tantas asperezas suscitan, son reclamo para turistas de clase alta que se gastan al día una media de 72 euros, según la Consejería de Turismo.

La nueva normativa será más restrictiva en materia urbanística, a nadie se le escapa. Actualmente, se permite que al campo de golf se le sumen sobre diez viviendas por hectárea -es el baremo que se tomó como referencia en el último proyecto de Guadix-.

En Andalucía hay en estos momentos 86 proyectos nuevos en tramitación, que llevan a su alrededor 160.000 viviendas. En Granada se han planteado una veintena, todos ellos ambiciosos y millonarios, y con urbanizaciones próximas. Todos estos proyectos están a expensas de la nueva normativa. Hasta que no se apruebe, sus promotores no sabrán si cumplen los requisitos o tienen que replantear el proyecto. La Junta no los tramitará hasta que no se conozca el nuevo marco.

A lo largo de los últimos años, se han propuesto campos de golf en Loja, Santa Fe, Atarfe, Gójar, Dílar, Albolote, Guadix, Alquife, Almuñécar, Otura, Las Gabias, Motril, Salobreña o Molvízar, entre otros municipios. En algunas localidades, a pares. El que menos, llevaba parejo casi un millar de viviendas, pero también es verdad que el volumen de metros que se maneja es inmenso. Hasta en la capital, en una de las zonas de expansión de La Chana, se ha planteado una escuela de golf.

No todo lo que se vende se confirma. Es la Consejería de Obras Públicas la que acaba dando el visto bueno. A pesar de la veintena de proyectos anunciados -de los que muchos se han presentado en público-, la Junta apenas tiene conocimiento oficial de una decena, entre ellos los que ya existen y fueron aprobados hace años en Las Gabias, Otura y Motril. Además, Obras Públicas tiene certeza de dos campos de golf en Motril, otro repartido entre Dílar y Gójar, y el de Atarfe. La Comisión Provincial de Urbanismo aprobó en diciembre el que se ubicará en el paraje de la Veguilla, en Guadix. Frente a la veintena de instalaciones propagadas, sólo cuatro han llegado a las oficinas de la Junta.

Amoldarse

Uno de los proyectos más avanzados es el del mega complejo 'Milenarium', que ocupará 240 hectáreas entre Gójar y Dílar. Supondrá una inversión de 400 millones de euros y la creación de más de 1.000 puestos de trabajo. Al socaire del campo de golf, de 18 hoyos, se edificarán alrededor de 3.000 viviendas, 750 de VPO. El alcalde de Gójar, Francisco Javier Maldonado, vaticina que 'Milenarium' no tendrá problemas: «Está contemplado el riego por agua reciclada. Incluso se van a poner unos sensores que detectan hasta dónde impregna el agua la raíz para ahorrar un 30% de consumo». Al proyecto todavía le falta la aprobación provisional del pleno -algo que se producirá, previsiblemente, este año- y después se remitirá a la Junta, que aprobará el proyecto si cuenta con el nuevo decreto y todo está en orden.

El único que se ha 'salvado' ya ha sido el de Guadix. Ha sido el más rápido. Ocupará 1,6 millones de metros cuadrados y cuenta con una inversión de 300 millones de euros. 536.954 metros cuadrados tendrán uso residencial. «El decreto no tendrá carácter retroactivo. No es lógico que la misma Comisión de Urbanismo que le ha dado luz verde dé ahora marcha atrás», explican fuentes de la Junta. El campo de Guadix va para adelante y ya hay otra empresa que se ha interesado este verano por montar otras instalaciones de envergadura, ocupando dos millones de metros.

Otros proyectos se quedan en el aire, en la indefinición de si lo que hay previsto tendrá encaje en el nuevo marco legal. Un equilibrio difícil. Por un lado el cacareado desarrollo sostenible. Pero por otro, alrededor de una veintena de iniciativas millonarias. La que menos se cuenta por cientos de millones de euros. El desarrollo urbanístico vinculado a la supervivencia de estos proyectos es espectacular: 750 viviendas en Santa Fe, 2.500 en Atarfe, 3.000 en Gójar, 1.500 en Albolote, más de mil en Guadix los números se disparan en la Costa.

Todo está a expensas del borrador que salga de la Junta. Una norma controvertida, que levanta ampollas en algunos sectores, pero que también era necesaria. El problema de estos años es que el novedoso 'boom' de los campos de golf ha pillado tan de sorpresa que no existe un marco legal preciso. Desde la legislación vigente se ha intentado amoldar los proyectos que iban proliferando como setas.

El filtro no sólo será urbanístico. Otra de las limitaciones será la obligatoriedad de regar con agua reciclada no potable. El consumo de un campo de golf es enorme. A modo de ejemplo, un campo de golf medio requiere unos 5.000 metros cúbicos de agua al año, el equivalente a un municipio de unos 7.000 habitantes.

quicochirino@ideal.es

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