El Barça rechaza el cartel de favorito

Los jugadores del Barça aprovecharon su primera rueda de prensa en Japón para descolgarse el cartel de favoritos en el Mundial de clubes que se disputa en tierras niponas esta semana. Los azulgrana consideran que el dichoso 'jet lag' les dificultará la conquista del único título que falta en sus vitrinas.

Puyol, Xavi y Ronaldinho, los tres capitanes, se pusieron de acuerdo para ahuyentar cualquier hipotética ventaja. Lo hicieron después de una suave sesión preparatoria en la Ciudad Deportiva del Yokohama Marinos. Los seis grados de temperatura a las once de la mañana marcaban el aspecto de los futbolistas. Ataviados con pantalones largos, jerséis, gorros y guantes, se ejercitaron durante una hora. Tuvieron suficiente para comprobar que la aclimatación está siendo dura. Algunos de ellos han sufrido en las últimas horas leves mareos que revelan que el equipo azulgrana todavía no se ha adaptado al desfase horario, al ser el último en incorporarse a la competición.

Esas sensaciones vocalizaron las palabras de los azulgrana. «Es la primera vez que llegamos a un torneo sin ser favoritos debido a la diferencia de horario», afirmó Ronaldinho. Una opinión secundada por Xavi, al recordar que :el América lleva más tiempo aquí». Aunque los servicios médicos del Barcelona confirmaron que todos los integrantes de la plantilla se están adaptando a los ciclos biológicos de vigilia, sueño y alimentación, también señalan que necesitarían algún día más para estar al cien por cien.

Con 'jet lag' o sin él, este Barça tiene una oportunidad única de pasar a la historia si obtienen su primer Mundial de clubes. Catorce años después de la final perdida por el 'Dream Team' ante el Sao Paulo, los Ronaldinho y cía. están muy ilusionados ante la opción de engrandar su palmarés y el del club.

Para ello deberán derrotar mañana al América de México en el duelo de semifinales. Un conjunto del que sobresale el 'Piojo' López. «Somos conscientes de que es un gran jugador, con mucha movilidad y muy rápido. Pararlo será un trabajo de equipo. Tendremos que estar muy juntos para que la gente que le debe enviar los pases no pueda hacerlo. Entonces será más fácil para la defensa», apuntó Puyol.

Para combatir la velocidad del adversario el Barça quiere contar con su mejor aliado. «Trataremos de tener el balón, ahí estará la clave del partido. Quien mejor lo trate, tendrá mucho ganado», enfatizó Xavi.

Un duelo de altura

Si los pronósticos no se tuercen, el Barça se enfrentaría, con toda probabilidad, en la final del próximo domingo, al Internacional de Porto Alegre. El campeón de la Copa Libertadores es un rival muy apetecible para Ronaldinho. «Conozco a todos sus jugadores porque actúan en el equipo de mi ciudad y mis amigos siempre me dicen cuándo hay algún joven que destaca», explicó el brasileño.

Sería un choque de altura para un equipo que está a un paso de tocar el cielo. Y es que los jugadores azulgrana se alojan en el edificio más alto de todo Japón, la Landamark Tower. Dormitan en el Yokohama Royal Park Hotel, un majestuoso rascacielos de 297 metros de altura, que se construyó en 1993. Desde allí, los azulgrana tienen una vista privilegiada del puerto más importante de Japón y contemplan con tranquilidad el ir y venir de barcos soñando que el próximo domingo se alzan con el Mundial de clubes y completan el mejor año deportivo de sus vidas.