El Niño de las Pinturas se hace mayor

Es uno de los mayores artistas granadinos; perdón, andaluces, perdón universales. Y es joven, y raro, y gamberro y va con su moto y te lo encuentras en el cajero de la calle Molinos y en las paredes de toda Granada. Y, también, se va haciendo mayor. En su última exposición, titulada 'En el bar y en la calle', muestra una ruta por sus obras pintadas en las calles de Granada combinada con una exposición de cuadros colgados en bares del centro de la ciudad. Pide una media de seiscientos euros por cada uno, aunque, lógicamente, los precios oscilan según qué obra.

Raúl, El Niño de las Pinturas, es omnipresente en Granada. Aparcas el coche en el último aparcamiento inaugurado junto a la plaza de Gracia y en el subterráneo reviven sus pinturas. Está en las casas, en los balcones, en las ventanas, en las paredes, con sus texturas diferentes, con sus colores y con sus frases. El niño Raúl ha marcado un camino a seguir para los grafiteros doquiera pinten sus paredes.

Y escribe cosas. Cosas hermosas. En la calle Molinos escribe: '¿Quién juega con nuestros hijos?' o 'Cansado de no encontrar respuestas, decidí cambiar mis preguntas'.

En la calle Santiago: 'Una ciudad que desaparece'.

En la calle san Matías: '¿Dónde nos llevan nuestros pasos?'

O en la calle Elvira: 'El mundo está oscuro...'

A veces sus palabras suenan a lágrimas que desbordan un mar de pintura al fresco de la calle.

Raúl, Sex, el Niño de las Pinturas, ha creado una exposición para este verano que se titula 'En el bar y en la calle'. En el bar, mensajes dentro de botellas. En la calle, un paseo siguiendo letras y perdiéndose por marcas rojas. Una exposición viva llena de esquinas y callejones.

La exposición de Sex, El Niño de las Pinturas, como firma todas sus obras, puede disfrutarse gracias a unos folletos que él mismo ha diseñado y que están repartidos por los bares del centro de Granada.

El propio Raúl, en este folleto, destaca en un mapa sus principales grafitis al tiempo que añade sus obras colgadas en tres bares: 'Candela' e 'Hicuri' (en el Realejo) y 'Salao' (en la plaza de la Romanilla).