Un joven tosiriano dispara en la cabeza a su ex y al nuevo novio

La Guardia Civil busca al cierre de esta edición a un joven tosiriano, cuyas iniciales son F.P.C., que ayer disparó supuestamente contra su ex compañera sentimental y contra el actual novio de ésta con una pistola. Ambos están heridos de bala. Ella, una joven de unos 20 años conocida como Sheila e identificada con las iniciales M.S.R.C. por la Guardia Civil, tiene un tiro en la cabeza. Una herida limpia con orificio de entrada y salida por la parte derecha de la mandíbula. En principio no se teme por su vida, aunque al cierre de esta edición estaba ingresada en la UCI del Neurotraumatológico con pronóstico reservado. Él, de 24 años, llevaba un disparo en el brazo, también limpio. Entrada y salida. Cuatro horas después del tiroteo ya le habían dado el alta, según indicaban fuentes hospitalarias.

La persona a la que busca la Guardia Civil por la agresión no podía siquiera aproximarse a la joven. No ha trascendido qué ocurrió exactamente entre ellos antes del tiroteo de ayer, pero sí hay constancia de la existencia de una orden de alejamiento en vigor, según han confirmado fuentes del Instituto Armado. Distintas fuentes consultadas en el pueblo indican que la chica tiene un niño de dos años en común con el fugitivo. En el pueblo recuerdan un episodio sonado en el parque entre ambos.

El tiroteo ocurrió pasadas la cinco de la tarde en las afueras de Torredonjimeno. Zona de polígonos industriales y del camino de Jamilena. En un viejo turismo plateado viajaban Sheila, su novio de origen magrebí, y otro joven que iba al volante. En la zona había otro coche. Un turismo granate. El coche gris iba en marcha cuando desde el otro vehículo, que se situó a la derecha, comenzaron los disparos.

Las balas entraron por la ventana del copiloto. Una fue a impactar en la zona maxilar de la chica, con trayectoria de entrada y salida. Otra fue a alojarse en el brazo de su nuevo novio. «Yo estoy bien, sólo me han saltado los cristales pero estoy bien, no me han herido», relataba el conductor a los agentes de la Guardia Civil que se hicieron cargo de la investigación.

Asistencia sanitaria

En cuanto fue consciente de lo que había ocurrido, el conductor del vehículo gris metió el pie en el acelerador. Llevaba a dos personas heridas, una al lado y otra detrás. Así que fue directo al centro de salud, en la Avenida de la Paz. Llegó pasadas la 17,20 horas.

Aparcó en la acera de enfrente al centro médico. Pidió ayuda a voces. Otras personas que pasaban por la calle acudieron a auxiliarlo. Entre varios metieron a los heridos en el centro de salud. «Ella llevaba la cabeza chorreando de sangre. Al otro lo pasaron con algo en el brazo, pero no sangraba», dicen los testigos consultados.

Los servicios de urgencias de Torredonjimeno les procuraron los primeros cuidados. A las 17,25 horas los servicios de coordinación de emergencias del 112 recibieron una llamada desde el centro de salud pidiendo refuerzos sanitarios. El 061 envió hasta allí una ambulancia preparada para el transporte de heridos en situación crítica.

Al hospital

El joven magrebí, afincado desde hace tiempo en Torredonjimeno y que trabaja en un hotel de la localidad, fue trasladado hasta Jaén en una ambulancia de Urgencias convencional de la empresa Manuel Pascuau. Una de las dos que ayer había preparadas en el pueblo para atender cualquier contingencia. Sheila salió del centro de salud con un aparatoso vendaje, en la ambulancia de críticos.

La persona sobre la que recaen todas las sospechas está ya fichado en Torredonjimeno por actividades delictivas anteriores. Una persona «conocida», indicaba la agencia Europa Press. En su pueblo lo conocen por el apellido, que ayer corría de boca en boca. Al cierre de esta edición tenía tras su pista a todas las fuerzas de seguridad del Estado de la provincia.