Piden soluciones a los graves daños causados por la rotura de un colector

La tromba de agua caída en Úbeda el martes provocó graves daños en algunas viviendas situadas en el entorno de la avenida 28 de Febrero. Como en otras ocasiones, un antiguo colector que discurre bajo esta zona residencial reventó y el agua inundó varios patios, llegando a más de un metro de altura, también en el interior de las casas. Debido al empuje, además se vino abajo el muro que separaba las dos viviendas más afectadas, quedando todo plagado de escombros, barro, aguas fecales y residuos de un matadero cercano. Los daños materiales son cuantiosos.

Los habitantes de esta zona vienen denunciando desde hace tiempo los problemas y el peligro que les supone el colector que pasa bajo sus casas. Las muchas protestas presentadas no han dado resultado y la situación, lejos de mejorar, ha empeorado considerablemente. A mediados de septiembre del pasado año, otra rotura con liberación de caudal arrancó de cuajo y trasladó varios metros la piscina de una vivienda situada una calle más arriba. Y con cada tormenta un poco más fuerte de lo normal, el agua ha ido afectando a más parcelas.

El colector que quita el sueño a los vecinos canaliza aguas que llegan desde el entorno del hospital, un matadero y la urbanización Las Vaguadas. Según Gregorio Molina Jódar, propietario de la vivienda más dañada ahora, este colector «está obsoleto y no debía existir ya». De esta forma, contó a IDEAL que cuando se recepcionaron las casas hace seis años, el colector tenía que haberse anulado al ser antiguo e insuficiente, conectando las canalizaciones a nuevas infraestructuras de mayor diámetro y capacidad. Pero como no se ha hecho, el problema no para de repetirse con nuevas roturas debidas a la presión. «Los vecinos estamos asustados porque cuando llueve sabemos que nos puede tocar a cualquiera», aseguró, añadiendo que «algunos llevan ya seis inundaciones».