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JOSÉ CARLOS GONZÁLEZ
Sábado, 5 de junio 2010, 05:13
El ambiente de crispación que se vive en el seno de la Real Cofradía Matriz de la Virgen de la Cabeza tuvo ayer por la tarde un episodio más, esta vez más tenso. Los ánimos se caldearon cuando el representante del obispado, Rafael Higueras, anunciaba a las cuatro de la tarde la suspensión de la convocatoria para someter a votación el cambio del artículo 25.1 que aborda la elección de hermano mayor. El aplazamiento de esta convocatoria vino dictada desde el mismo Vaticano, o sea desde Roma.
Fue una decisión que pilló de sorpresa a los presentes, porque se dio a conocer justo al comienzo de la votación y porque venía dictada desde Roma. Al principio ocasionó acusaciones a miembros de la diputación (que pudieron provocar enfrentamientos) y generó indignación entre las primeras personas que fueron a votar (algunas se vieron impresionadas y superadas por el ambiente tan caldeado que allí se respiraba), que se fue mitigando cuando miembros de la diputación abandonaron la sede de la Real Cofradía Matriz.
El juez diocesano del obispado, Rafael Higueras, explicó a esta redacción todo lo sucedido. Indicó que las previsiones del Obispado apuntaban a la celebración de esta votación (el obispado lo designó incluso como delegado), porque el obispo envió un decreto al presidente de la Cofradía Matriz y a la diputación para la celebración de la asamblea, «pero se ha producido un incidente posterior que habrá que valorar».
Se refiere Higueras que desde la secretaria de la diputación se ha elevado un escrito ante el Pontificio Consejo de Laicos del Vaticano pidiendo la suspensión de la asamblea alegando unas posibles irregularidades.
Llegó a Roma el pasado día 1 de junio y como relata Higueras, el obispo no lo vio hasta el jueves, después de una visita pastoral. «El escrito es de cinco folios y contempla que las listas no están bien hechas, que no es competencia de una asamblea general un referéndum, todos los motivos están razonados y ahora se tienen que ver los puntos para rechazar a acoger las impugnaciones», remarcó Higueras, quien hizo un llamamiento a la calma. «La Virgen está por encima de todas las cosas y cuando se le tiene un amor verdadero por Ella, están cosas se tienen que olvidar».
Reacciones
El presidente de la Real Cofradía Matriz, José María González, señala que el obispo nombrará a un instructor para estudiar y corregir todas las impugnaciones. «Ahora se paraliza todo el proceso de elección de hermano mayor», constató.
El vicepresidente de la Matriz, Joaquín Luque, hizo un llamamiento a la prudencia. «Los cofrades que han venido a votar han firmado un escrito donde reflejan que han venido a ejercer su derecho a voto y que se les ha negado».
La integrante de la diputación, María de Carmen de Torres, estaba muy indignada por lo acontecido. «Soy diputada y no se me ha comunicado del escrito enviado a Roma, por lo que voy a impugnarlo por un abogado, porque me han engañado, se han reído de los 2.200 cofrades». Reprocha al órgano de la diputación que no trabajan nada por la Matriz.
Miguel Martínez, un cofrade de base, califica de vergonzosa la situación vivida ayer. «Entre unos y otros están matando a la Cofradía y estamos dando la nota». Recordó que una asamblea propuso la votación para la modificación del artículo 25.1.
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