El trágico móvil sexual tras el crimen del pantano de Susqueda da un giro al caso

La investigación para esclarecer el 'porqué' de la muerte de Marc y Paula continúa rodeada de incógnitas. Los dos jóvenes, cuyos cadáveres aparecieron en el pantano de Susqueda con claros signos de violencia, son el objeto de estudio de los especialistas que ya han logrado descartar algunas hipótesis y reforzar otras.

Ambos fueron encontrados un mes después de desaparecer con evidentes signos de violencia y, desde entonces, son muchas las preguntas de los investigadores, que trabajan ahora con la hipótesis del móvil sexual.

Parece descartado que el crimen respondiese a un plan premeditado, a pesar de la forma en la que fueron encontrados: ella con un disparo en la cabeza y él con varios orificios en el cuerpo que, en un primer momento, se pensó podían responder a heridas de arma blanca.

En todo momento se descartó la posibilidad de que la pareja hubiera sido víctima de un robo, ya que se encontraron sus pertenencias en el Opel Zafira en el que llegaron al pantano, cuya ventanilla de la puerta del copiloto se rompió de dentro hacia fuera, según los investigadores.

Así, las pesquisas realizadas hasta el momento apuntan a un móvil sexual, aunque no se han cerrado otras líneas de investigación como aquella que apunta a que en el asesinato de los jóvenes pudieron participar varias personas.

Las hipótesis de que existiera un móvil sexual no es la única, pero esta es la que está gozando de mayor relevancia. Es posible que les sorprendieran desnudos en el vehículo donde iban a pasar la noche.