¿Cómo conseguir unos dientes blancos y perfectos?

Si los ojos son el espejo del alma, nuestra boca también dice mucho de nosotros en la primera impresión. Por esta razón si hay una cosa que todos queremos lucir es una sonrisa de anuncio, unos dientes blancos como la leche que sean la envidia de todos los que los pueden apreciar. Es muy normal que nuestros dientes se manchen, y que cojan un color amarillo, especialmente si además fumar, tomamos café en exceso o llevamos mucho tiempo sin hacerle una visita al dentista. Además ya no sólo es un condicionante estético sino que el aspecto de tus dientes también puede ser producto de que padezcas de placa dental o de que tengas daños en el esmalte dental, lo que conlleva efectos perjudiciales también para la salud, como heridas o infecciones. Lavarse los dientes con asiduidad es un remedio vital para lucir una buena sonrisa, pero no es el único método para presumir de la blancura de tus dientes, y es que cada vez hay más tratamientos odontológicos que dejan los dientes relucientes, eso sí a un coste alto. Si no quieres gastarte tanto dinero, además de lavarte los dientes diariamente puedes poner en práctica los siguientes consejos que te vamos a dar. Todos los puedes seguir a partir de productos cosméticos y naturales, que por lo general encontrarás a buenos precios, por lo que lucir una sonrisa blanca y reluciente está al alcance de todos.

El primer remedio que te vamos a proponer es el lápiz de blanqueamiento dental. Es un producto cosmético que puedes encontrar en cualquier tienda y que es muy útil para blanquear los dientes o igualar las diferentes tonalidades de ellos. Es de fácil uso por lo que es perfecto para realizarte un blanqueamiento desde casa y en cualquier momento. Es muy rápido y en menos de una hora podrás presumir de unos dientes blancos y con brillo sin sufrir hipersensibilidad o irritaciones en encías. Es recomendable para un blanqueamiento inmediato pero no duradero ya que si bebemos agua o comemos, al aplicarse directamente en los dientes, perderemos el producto. Es muy importante que esperes 10 minutos con la boca abierta mientras tus dientes absorben el líquido que le has aplicado con el lápiz y que se suele incluir junto a él.

Otra buena opción sin duda son los blanqueadores, donde tenemos que distinguir entre dos; con peróxido de carbamida y sin él. Los que incluyen este componente, que se utiliza en los blanqueamientos profesionales son muy efectivos y rápidos, ocasionando que los dientes reluzcan en poco tiempo. Aunque cuanta más cantidad de peróxido mejor puesto que más blanquea, no es especialmente recomedable para encías sensibles puesto que es muy irritante y provoca hipersensibilidad dental. Busca que incluya un gel remineralizante puesto que aporta a los dientes aquellos minerales que hayan podido perder con el paso del tiempo. No obtante, para los que no sean muy fans del peróxido de carbamida, también hay blanqueadores sin él, y por lo general suelen ser bastante eficaces, solo que esta vez no produce hipersensibilidad ni irritaciones en encías. Suele ir con luz que debes mantener en tu boca durante 20 minutos para que funcione de forma efectiva.

Finalmente también existen algunos remedios naturales que puedes poner en marcha y que te garantizan el blanco de tus dientes. Puedes utilizar jugo de limón y mezclarlo con una cucharada de sal y posteriormente cepillarte los dientes con la mezcla. Otra opción es hacerlo a partir de vinagre de manzana y una cucharada de bicarbonato de sodio. La cáscara de naranja y la pulpa de las fresas también son sustancias muy eficaces.