Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Javier García Martín
Viernes, 26 de junio 2015, 01:47
Todo empieza cuando un turista que ha viajado a zonas tropicales seducido por un ánimo intrépido empieza a encontrarse mal de regreso a casa. También vale un misionero, un expatriado o un inmigrante que se han desplazado desde (o hacia) el extranjero para ver a los suyos y que no pueden dejar el baño ni por un segundo, o les invade la fiebre.
En cuanto acudan a las urgencias y declaren que han vuelto de un periplo por un país tropical, pasarán a formar parte de los más de 3.000 sujetos que durante la última década han visitado la Unidad de Medicina Tropical del Hospital de Poniente. Pueden, en el peor de los casos, estar sufriendo malaria o paludismo, una enfermedad que a día de hoy sigue acarreando una mortalidad alta si no se diagnostica a tiempo.
El doctor Joaquín Salas ha detectado más de un centenar de estos casos desde 2004, año en el que se inauguró este departamento de la que es director y que forma parte de la Red Española de Unidades de Medicina Tropical (REUMT), coordinada por el Instituto de Salud Carlos III. La 'prevalencia' de esta enfermedad en las salas de Poniente ha aumentado en los últimos años. «Cerca de un millón de españoles viaja cada año a un país tropical», explica Salas a IDEAL.
Este doctor es, a día de hoy, la máxima autoridad de todo cuanto pasa en la provincia alrededor de enfermedades importadas tropicales, aquellas que un sujeto adquieren en un país extranjero (normalmente con un nivel menor de desarrollo), pero que se manifiestan en nuestro medio. La malaria es la más frecuente, pero no la única. Hay patologías también más comunes -dentro de la excepcionalidad que supone su adquisición-, como la esquistosomiasis, causada por gusanos parásitos.
El riesgo del dengue
La Organización Mundial de la Salud (OMS) añade además la leishmaniasis, la oncocercosis, la filariasis linfática, la enfermedad de Chagas o la tripanosomiasis africana. Para la transmisión de estas enfermedades es necesario que existan vectores (como moscas, mosquitos o caracoles) que, hoy por hoy no están aquí, por lo que el contagio, en teoría, no es posible. «La mayoría de estas enfermedades no supone un riesgo para la población porque no se pueden transmitir en nuestro miedo», señala Salas.
Tirando de futuribles, la excepción viene aquí por la vía del dengue. El mosquito tigre, su vehículo de transmisión, está encontrando acomodo por la cuenca mediterránea y ya ha llegado desde Cataluña a Andalucía, Almería incluida. «Hoy en día, con el cambio climático y los viajes internacionales hay una invasión de estos vectores», explica el director. Aunque cauto, reconoce que el contagio aquí «no es imposible» en un futuro cercano. Para ello, detalla, tiene que darse la coincidencia de que el insecto pique a un afectado y con las mismas transmita su carga vírica a alguien sano. Ha sucedido en Italia o Francia.
Lo más importante para prevenir todas estas enfermedades es acudir antes de marcharse al Centro de Vacunación Internacional. El de Almería, como ya relató a IDEAL su responsable, María Luisa Maroto, no ha parado de aumentar su trabajo. Respetar sus vacunas, profilaxis y consejos es el primer paso para evitar un desgraciado contagio, insiste también Salas. «Muchas de las personas que vemos han hecho algo de lo que no se recomienda con alimentos o agua no embotellada», recuerda.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La artista argentina Emilia, cabeza de cartel del Música en Grande
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
España vuelve a tener un Mundial de fútbol que será el torneo más global de la historia
Isaac Asenjo y Álex Sánchez
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.