Las investigación de la muerte del anciano desaparecido sólo contempla causas naturales

Manuel García Puga, el hombre de 88 años de edad vecino de El Zapillo y desparecido desde la mañana del sábado, fue finalmente localizado sin vida a última hora de este martes en un descampado cercano al Camino de La Goleta y la Vega de Acá, un entorno ubicado a unos 20 minutos a pie desde la puerta de su residencia en la calle Bilbao y en cuyas inmediaciones se encuentra la casa de uno de sus familiares.

Precisamente, sus seres queridos, que se encuentran conmocionados por el resultado de la búsqueda, recibieron ayer los restos mortales del patriarca y oficiaron una misa en su honor en la iglesia de San Pío del mencionado barrio almeriense.

García llevaba en paradero desconocido desde la mañana del sábado, cuando el último testimonio fiable recopilado por la Policía Nacional -el de unas vecinas- le ubicaba en las inmediaciones de su domicilio. Una vez activado el dispositivo de búsqueda, en el que también colaboraron efectivos de Policía Local y agentes de ambos cuerpos fuera de servicio, la investigación se centró en rastrear su teléfono móvil.

Con todos sus efectos

Los datos recibidos por el dispositivo permitieron establecer un perímetro en cuyo interior, tras peinarlo cuidadosamente, acabó apareciendo el cuerpo de García, gracias también al despliegue de un helicóptero -se preveía usar una dotación de guías caninos expertos en la búsqueda de personas, pero finalmente no ha sido necesario-.

Con el caso prácticamente archivado, la investigación sólo contempla causas naturales del fallecimiento. Además de no presentar signos de violencia, el cuerpo apareció con todos sus efectos personales, lo que suma un argumento más a favor de esta conclusión. El cuerpo, además, fue hallado en avanzado estado de descomposición, por lo que se estima que la muerte podría haberse producido a las pocas horas de su desaparición en mitad de un día de especial calor, por lo que las explicaciones más plausibles apuntan a un desvanecimiento con un funesto resultado.