El alcalde de Almería espera que la obra de la EDAR del Bobar permita "solucionar cuanto antes" los vertidos en el Andarax

El alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador (PP), espera que la ampliación de la depuradora de El Bobar permita "solucionar cuanto antes" el problema "endémico" que se registra al final del lecho del río Andarax, que, a su paso por la ciudad, arrastra aguas residuales procedentes de los municipios del Bajo Andarax ante la ausencia de una estación depuradora.

Así se ha pronunciado el regidor ante los medios poco antes de que la Junta de Andalucía anunciara que ha reiniciado las obras de ampliación de la depuradora que permitirá asumir el tratamiento de las aguas y acabar con los vertidos; una obra que cuenta con un presupuesto de más de nueve millones de euros y que se han visto interrumpida temporalmente ante la falta de tesorería.

El primer edil ha manifestado que es necesario tener la depuradora terminada para que ésta tenga "capacidad suficiente" para "asumir" las aguas fecales que generan los siete municipios de la comarca del área metropolitana y Viator.

Así, ha asegurado que "en el momento en el que esté terminada la obra", el Ayuntamiento no tendrá "inconveniente" en permitir la conexión ya que, además, la proliferación de vertidos afecta también a los vecinos de los barrios que colindan con el margen del río, que deben soportar malos olores y la proliferación de insectos.

"Ya fuimos solidarios con Huércal de Almería sin obligación. Seríamos igualmente solidarios con el resto del Bajo Andarax", ha manifestado el alcalde, quien, no obstante, ha recordado que su prioridad es "defender los intereses de los almerienses capitalinos".