Miguel Cárceles
Miércoles, 30 de septiembre 2015, 01:46
La enorme distancia que separan las infraestructuras ferroviarias de Almería de las del resto del país ha llevado a algunos representantes políticos a tirar de imaginación para intentar dar soluciones urgentes a un problema que solo se resolverá de forma definitiva mediante grandes inversiones infraestructurales.
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El alcalde de Almería ha anunciado que negocia con ADIF y Renfe la implantación de servicios lanzadera de autobús que permitan conectar Almería con la estación de Granada -adonde llegará el AVE a finales de año- y que de este modo pueda haber viajes con transbordo en tiempos algo más competitivos que los del ferrocarril directo.
En principio, sumando la hora y media de viaje en bus (en tren son dos horas y 20 minutos) a las tres horas de AVE, este viaje intermodal con transbordo en Granada permitiría llegar a Atocha con hora y media de ventaja sobre los que viajen en Talgo. «Hasta que el AVE llegue desde Murcia o haya cambiador», dijo el regidor. La decisión aún no se ha tomado.
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