La lesión de Igor Engonga fue la 'cara y la cruz' de la alegría de la UD Almería B en Langreo

Los jugadores de la UD Almería B, que tendrá mañana jornada de descanso, reanudará el miércoles la actividad preparatoria con vistas al partido del próximo domingo, a las 12.00 horas, en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, contra la UP Langreo. Corresponderá a la vuelta de la primera eliminatoria del playoff de ascenso a Segunda División B, tras la victoria (0-1) del filial rojiblanco en el envite de ida.

Un partido, el jugado en el Nuevo Ganzábal, que tuvo como destacado protagonista de la UD Almería B al defensa central Igor Engonga. Ocho minutos después de marcar el gol de la victoria almeriense tuvo que ser sustituido por lesión en una rodilla y está a la espera del informe médico para conocer el alcance de la misma. El futbolista ha comentado que «sentí un ruido en la rodilla y sabía que tenía algo importante». La cita del domingo, de entrada gratis para los abonados del club almeriense, tendrá el arbitraje del melillense Abderrahim Nourdin, que busca, como langreanos y almerienses, el ascenso de categoría.

Cara y cruz para Engonga

El santanderino Igor Engonga, defensa central de la UD Almería B, vivió las dos caras más opuestas de la práctica del fútbol. Marcó el gol, que supondría la victoria rojiblanca, en el m. 26 del partido. Pero muy poco después, en el m. 38 y en una jugada por la disputa de un balón, resultó lesionado, viéndose obligado a abandonar en camilla el terreno de juego, siendo sustituido por su compañero Javi Pérez.

Durante la mañana de hoy ha sido sometido a reconocimiento por los servicios médicos del club y está a la espera de los resultados para conocer el alcance de la lesión, que los aguarda con impaciencia, aunque con moral alta. «Son circunstancias del fútbol y hay que afrontarlas lo mejor que se pueda. Hay que esperar los informes médicos». En relación al lance que generó la lesión, recuerda que fue fortuito pero que se alarmó. «Fui a despejar un balón, sentí ruido en la rodilla y sabía que tenía algo importante».

La expedición rojiblanca, nada más arribar a la capital almeriense, ha realizado una ligera sesión de entrenamiento, para desentumecer músculos, en el campo de La Vega de Acá. Mañana martes es día de descanso para los jugadores de la UD Almería B y desde el miércoles, igualmente en La Vega de Acá, comenzarán los entrenamientos con vistas al partido de vuelta del domingo.

Con atino y criterio

En la prensa escrita asturiana, en relación al encuentro de ida, se pudo leer que el equipo de la UP Langreo no anduvo atinado cara al gol y se narraba que la UD Almería B supo jugar sus bazas. Así, en el diario El Comercio, perteneciente al Grupo Vocento y en edición digital, se ofrecía el titular de El Langreo paga con derrota su falta de puntería y en la crónica se resaltaba que los azulgranas dirigidos por Hernán Pérez merecieron algo más en el marcador final. «El Langreo fue superior al Almería B, pero los andaluces aprovecharon un testarazo de Igor Engonga en la primera mitad para salir de Ganzábal con un gran resultado de cara al choque de vuelta y llenan de curvas la hoja de ruta hacia Segunda B del conjunto dirigido por Hernán Pérez. El asedio langreano se intensificó en la segunda parte con el paso de los minutos y con los mismos protagonistas, Batalla volvió a salir victorioso para mantener el cerrojo de su marco».

Por su parte, en el diario La Nueva España, igualmente en formato digital, el titular de la crónica del partido entre langreanos y almerienses fue Revés para el Langreo: toca remontada. En este medio se exponía que la UD Almería B, dirigida por Fran Fernández, jugó con criterio y bien posicionado sobre el césped artificial del Nuevo Ganzábal. «Al Langreo le tocará remontar en Almería si quiere subir. El equipo de Ganzábal hizo méritos para llevarse un buen resultado, pero recibió un duro correctivo por parte del filial andaluz. Los almerienses se posicionaron bien en el campo y aprovecharon una de las pocas oportunidades de que dispusieron. A medida que transcurría el encuentro, el filial almeriense perdió la bisoñez y pronto se transformó en un equipo veterano. Los de Fran Fernández fueron ganando peso en el partido en distintas ocasiones».