Docentes por la Pública logra que su 'full monty' recorra toda España

Con el aforo casi al completo y alrededor de 70 docentes de toda la provincia en el patio de butacas, un grupo de integrantes de Docentes por la Pública consumó el 'full monty' que venían preparando desde el pasado año cómo modo de protesta ante las carencias que presenta el sistema educativo público andaluz. Fue una noche de baile y de lanzar la ropa al aire, pero también de reivindicación y de debate, ya que como reconocieron desde esta organización, se consiguió un ambiente distendido y propicio para analizar la situación por la que están pasando los colegios e institutos almerienses. No faltó, igualmente, las muestras de solidaridad con el profesor agredido la pasada semana en Cuevas del Almanzora. Precisamente, el acto comenzó recordando a los espectadores que «ya van cuatro agresiones de las que tenemos conocimiento en sólo unos meses, valga nuestra solidaridad con el compañero agredido y nuestra denuncia a cada una de las agresiones sufridas». Posteriormente, antes de que comenzará a sonar la música, se leyó un manifiesto en el que se expusieron las principales causas por las que Docentes por la Pública se decidió a organizar este evento y, además, ha venido realizando otras movilizaciones durante los últimos meses. En este sentido, se realizó un paralelismo con el cuento 'El traje del Rey', y se recordó que en el sistema actual «en las aulas siempre hay sitio para un niño más, al inspector siempre le falta un documento por rellenar y la profesora sustituta siempre está a un día de llegar». Los profesores reconocieron en su manifiesto que este desnudo «no deja de ser una gamberrada» y que el verdadero temor de los participantes, más que mostrarse sin ropa ante un concurrido auditorio, era volver el lunes a aulas abarrotadas y sin los recursos suficientes para poder impartir unas enseñanzas con parámetros de calidad. De esta forma, desde Docentes por la Pública se recordó a la administración que «una educación de calidad no se construye con papeles, sino con docentes, con menos alumnos por aula y con recursos materiales».

Es por ello que pidieron a los responsables de las administraciones en materia educativa «déjense de echar mentiras, de confundir, de complicar lo que es tan sencillo. Si racaneamos en profesores y somos generosos en protocolos y papeles, tendremos una escuela pública de juguete, de plástico que no plástica».

Una vez leído el manifiesto se apagaron las luces para que sonara 'You can leave your hat on' y fue el momento de descubrir las dotes para el espectáculo de este grupo de docentes que demostraron ante los presentes los resultados de meses de ensayo para poner punto y seguido en su calendario reivindicativo.