Polémica en Huércal: «Dijo que estábamos siendo valientes porque éramos ocho mujeres para un solo hombre»

Tal y como han confirmado a IDEAL diversas fuentes presentes y ha corroborado el propio regidor, todo partió de su asistencia como representante municipal al consejo escolar de uno de los colegios del municipio, el CEIP Clara Campoamor de Los Pinos. El máximo órgano de dirección del centro debía someter a votación la modificación de su presupuesto para poder ingresar unos 3.500 euros de parte del Gobierno autonómico andaluz a cuenta del Pacto de Estado contra la Violencia de Género. El punto se votó con la aquiescencia de todos los miembros.

Sin embargo el regidor Torres reconvino al darse cuenta que había votado a favor de un punto con el que no estaba de acuerdo y pidió rectificar el sentido de su voto. Es más, explicitó que no aprobaba la modificación del presupuesto porque no estaba de acuerdo con el «adoctrinamiento en violencia de género en los colegios». La reunión desde ese punto continuó enrarecida pese a que el punto se aprobó con la totalidad de los votos a favor salvo el suyo.

Ya en ruegos y preguntas, un miembro de la comunidad educativa, una docente, requirió al regidor que expusiese si su voto negativo en el punto presupuestario era algo que venía dictaminado por el Ayuntamiento en pleno o, por contra, era una decisión personal del regidor. Entonces, Torres aseguró –certifican varias fuentes– sentirse violentado porque todas las asistentes en ese momento eran mujeres y él el único hombre. «Dijo que estábamos siendo tan valientes porque éramos ocho mujeres para un único hombre», trasladaba ayer a IDEAL una de las personas asistentes a la reunión que consideró las palabras del regidor como «desafortunadas» y «fuera de lugar» en un contexto escolar como el que acogía el foro.

«Iban todas en contra mía», trasladaba ayer, por su parte, y a preguntas de este diario, el propio teniente de alcalde, Torres. «Me sentí amenazado, insultado en muchas formas por una idea», insistía Torres. No obstante, trasladaba ayer que sus palabras han sido sacadas de contexto y que el criterio de las allí presentes, miembros todas del consejo escolar iba a ser «siempre el mismo», esto es, «contrario» a su persona. «Hay muchos tipos de violencia, no solo la física, también la verbal. Fue una falta de educación y de respeto», subrayó el regidor ultraconservador.

El resultado de la reunión trascendió de inmediato a las redes sociales de los progenitores, entre los cuales la polémica ha corrido como la pólvora. Hasta el punto de que esta polémica entró incluso en el pleno de la Corporación huercaleña celebrado el pasado viernes. La concejal socialista Ángeles Castillo cuestionó al alcalde, Ismael Torres (PP), si la postura defendida por su teniente de alcalde y socio de gobierno había sido pactada y deliberadamente acordada. Torres negó la mayor ante el resto de los regidores.

Ayer, en declaraciones a IDEAL, el alcalde Torres marcaba distancias con su compañero de Gobierno –con el que reconoció haber hablado del tema– y aseguró que todo fue una postura personal del regidor malentendida por parte del resto de miembros del consejo escolar (pese a que en algunos momentos de la reunión llegó a haber 12 personas en la sala). «El voto de Arturo Torres va en una dirección totalmente contraria a la de mi equipo de Gobierno», censuró. «Aunque él dice que se abstuvo».

En el Consistorio esperan al acta del consejo escolar para revisar lo ocurrido y poder plantear alegaciones si se consideran zaheridos por lo allí recogido. No obstante, ya algún miembro del consejo escolar deslizó en la última reunión la posibilidad de grabar estos encuentros para poder así demostrar fehacientemente qué se vota o qué se dice en este foro participativo de dirección del centro escolar.