Javier García Martín
Sábado, 28 de marzo 2015, 01:07
Cuando los policías entraron en el cortijo de Vícar y dieron con el cuarto en el que supuestamente dormía una de las menores liberadas tras ser objeto de trata hallaron una fotografía suya con unos barrotes pintados. Un símbolo, este, que ilustra el calvario por el que han debido de pasar las dos jóvenes de 17 años durante su estancia en este club de alterne hasta su rescate. Según ha podido saber IDEAL, una biblia abierta por una página en la que un salmo canta a la liberación y un cuchillo de grandes dimensiones se escondían bajo la almohada, dando más pinceladas a una terrible estampa que se culmina con el hecho de que ambas llegaron a las costas españolas en patera desde su Nigeria natal.
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Las pesquisas para desmantelar esta situación comenzaron a finales del pasado año, cuando una inspección rutinaria detectó en este establecimiento adaptado para la prostitución la presencia de la primera menor, que fue liberada entonces. La sospecha de que hubiera otras en su misma situación llevó a las fuerzas de seguridad a abrir una investigación.
Servicios de cinco euros
Así, la Policía Nacional comenzó entonces a seguir la pista al supuesto regente del local y organizó un dispositivo esta semana para capturarle, conocido como operación 'Butano'. Además del captor, nigeriano de 44 años de edad que ya ha sido enviado a prisión, según ha conocido este periódico, los agentes encontraron a una segunda menor escondida entre las cámaras refrigeradoras situadas tras la barra del bar. La adolescente (su edad fue confirmada por los servicios médicos) había llegado a España a mediados de agosto del pasado año tras ser captada en el país africano, según las pesquisas dadas a conocer ayer. Ella era la propietaria, supuestamente, de la fotografía, la biblia y el cuchillo. Ambas mujeres han sido puestas en manos de la Junta de Andalucía, responsable de su cuidado.
Durante el registro, los agentes hallaron una libreta donde el investigado tenía anotada la contabilidad del pago de la deuda contraída por esta menor, ascendiendo a 3.990 euros. Según las anotaciones la joven pagaba unos 500 euros mensuales para zanjar el pago solicitado, a razón de entre cinco y diez euros por servicio. Al detenido se le atribuye la presunta autoría de un delito de corrupción de menores y un delito relativo a la prostitución. La Policía también arrestó a seis personas más que se encontraban en el local por infracción a la ley de extranjería.
La investigación ha sido realizada por agentes de la Brigada de Extranjería de la Comisaría Provincial de Almería en colaboración con agentes de la de Sevilla. En la actualidad, la Policía Nacional ha presentado la segunda fase de su plan contra la trata de seres humanos con dos vías confidenciales de contacto para víctimas, el teléfono gratuito 900 105 090 y el correo electrónico trata@policia.es.
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