Las custodias compartidas se duplican en cinco años en Andalucía

Concretamente, en 2016 se acordaron un 17,1 por ciento de custodias compartidas; en 2015 un 16 por ciento; en 2014 un 10,9 por ciento y en 2013 (primer año de referencia en el que las fuentes de información judicial permiten realizar un análisis comparativo de los datos) las sentencias otorgaron un 10,1 por ciento de custodias compartidas. Por su parte, en el 76,1 por ciento de los divorcios producidos en 2017, la custodia fue otorgada a la madre y el cuatro por ciento al padre.

Según los datos de la Estadística del Ieca a los que apunta la Consejería de Economía, Hacienda y Administración Pública, durante el año 2017 se produjeron en Andalucía 18.295 disoluciones matrimoniales, lo que representa un 2,8 por ciento más que el año anterior. Atendiendo al procedimiento, 17.437 fueron divorcios (95,3 por ciento), 840 separaciones (4,3 por ciento) y 19 nulidades (0,1 por ciento). Un total de 162 disoluciones se produjeron entre personas del mismo sexo (el 0,9 por ciento).

El número total de disoluciones representó una tasa bruta de 2,18 por cada 1.000 habitantes (2,13 en 2016), por debajo de la tasa nacional que se situó en 2,20 por mil. Las provincias de Málaga y Sevilla presentaron la mayor tasa (2,32 por mil) y Jaén la menor (1,89 por mil).

Más de un tercio de los divorcios (35,7 por ciento) correspondió a matrimonios con diez años o menos de duración. Concretamente, el tres por ciento de las parejas no alcanzó el primer año. La duración media de los matrimonios disueltos entre parejas de distintos sexo, fue de 16,8 años. En Jaén, la media alcanzó 18,4 años, frente al mínimo registrado en Almería y Málaga (16,2 años).

Por otro lado, casi una cuarta parte de las demandas de disolución matrimonial (24,3 por ciento) fueron presentadas por la esposa, mientras que en un 12,4 por ciento de los casos lo hizo el esposo.

Además, el 46 por ciento de los divorcios se produjeron en matrimonios que no tenían hijos menores, mientras que el 26,5 por ciento de las parejas tenía un único hijo menor de edad y el 24,1 por ciento, dos. En el caso de las separaciones, el 52,9 por ciento no tenía hijos menores, el 25,4 por ciento tenía un único menor y el 18,8 por ciento, dos menores.