Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Alberto Flores
Granada
Martes, 30 de agosto 2022, 11:23
El mes de septiembre está a la vuelta de la esquina y su llegada implicará un cambio de tiempo en la mayor parte de España. Tormentas, chubascos y un notable descenso de las temperaturas que servirán como anticipo de la llegada del otoño. Un ... tiempo inestable que se verá favorecido por la entrada de una borrasca de latitudes polares que se descolgará desde Groenlandia y podría dejar precipitaciones destacables en gran parte del país.
Noticia Relacionada
Así lo predice el modelo de Meteored, en el que se puede observar el descuelgue de una borrasca que comenzaría a aproximarse a la península desde el noroeste desde finales de semana. Y, junto a esa borrasca, llegaría también un aumento de la nubosidad y temperaturas más bajas. Esta situación podría ayudar a paliar la sequía que sufre todo el país. Sin embargo, las predicciones no son demasiado positivas en ese sentido. «Si miramos al inicio del otoño, entre septiembre y octubre, todo indica a que tendremos lluvias normales o por debajo de la media», detalla a IDEAL José Miguel Viñas, meteorólogo de Meteored en www.tiempo.com.
Esta situación «no es una buena noticia», ya que tal y como asegura el meteorólogo en la actualidad hay muchas zonas con un nivel de sequía «bastante crítico». Y esa falta de lluvias no solo afectará a España, sino que también se extiende a la totalidad de Europa. «Para paliar una sequía de estas características, que no solo viene del verano, se necesita un cambio de ciclo y que se encadenen situaciones de lluvia abundantes para cargar agua», motivo por el que no basta con que llueva un poco, sino que tendría que haber precipitaciones por encima de la media. «La situación no remitirá y será más crítica si no llegan esas lluvias».
Además de esa borrasca polar, el inicio de septiembre también estará marcado por un descenso notable de las temperaturas en gran parte del país. En este sentido, las mínimas bajarán en torno a 5 grados en la mayor parte de Andalucía. De este modo, ciudades como Granada pasarán de registrar mínimas de 22 grados a principios de semana a 11 grados menos durante la jornada del sábado. Algo que también se notará en las máximas, con temperaturas que rondarán los 30 grados en la mayor parte de la región.
Toda esta situación de chubascos y descenso de las temperaturas llegan tras un verano que ha sido bastante caluroso. Tanto, que incluso los expertos han quedado sorprendidos por ello. «Me ha sorprendido bastante la persistencia y magnitud del calor de estos últimos meses. Desde junio no ha habido una relajación en las temperaturas y es algo muy llamativo. Se han batido muchos récords», reconoce Viñas.
De hecho, a falta de cerrar los últimos datos del mes de agosto, el meteorólogo considera que es «casi seguro» que se superen las cifras del histórico verano de 2003. «Es algo que no solo ha sucedido en España, sino en otras partes de Europa y en otros lugares como China o Estados Unidos». Un fenómeno «global» que debe servir como «un toque de atención». Y es que lo que proyectaban los modelos climáticos hace años se está convirtiendo en una realidad.
«Esto no significa que el próximo verano será igual o que vaya a hacer más calor. Pero lo que sí está claro es que no tardaremos mucho en ver algo parecido porque es a lo que apunta la tendencia del calentamiento global», explica Viñas. Y eso no implica necesariamente que los veranos que vendrán sean cada vez peor, sino que las situaciones de olas de calor extremas las viviremos «cada vez con más frecuencia».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
España vuelve a tener un Mundial de fútbol que será el torneo más global de la historia
Isaac Asenjo y Álex Sánchez
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.