Desafiando al calor, muchas casetas se llenaron para disfrutar el miércoles de Corpus

Buen ambiente en la caseta Fabiola, en la que me encontré con un grupo de compañeros y amigos del Ayuntamiento de Churriana de la Vega: Darío Vallejo, arquitecto; María José Garzón, la sonrisa permanente; Mariló Corral, abogada; Luis Robles, informático; la interventora, Irene Fernández; Nerea Linares, de Recursos Humanos; el alma de las subvenciones, Puri Martín, que celebraba su cumpleaños; Andrés Ruiz de Valdivia, adjunto a Personal; Susana Morente, de Recaudación; María José Cortés y José Mª Verdugo, de Padrón y Tesorería, respectivamente; Javier Gómez, arquitecto técnico; mi compi Javier Martínez y Mati Vallejo que, además de su trabajo, lleva a gala su merecido título de arqueóloga –que tiemble Tadeo Jones–. Con ellos, Tulio Moreno, presidente de la caseta junto al grupo de jóvenes que se ha embarcado en esta bonita aventura.

Pausa en mi relato casetero para contar la movida política que provocaron las comitivas del PP y de Ciudadanos con sus máximos responsables, Juanma Moreno y Juan Marín –también estaba Inés Arrimadas– a la cabeza. Siempre es de agradecer que compartan nuestros días grandes.

Pero lo mío era pasear por las casetas y, como era obligado, la visita estrella estaba en la decana, Viva la Pepa, 60 años, que se dice pronto. Saludé a su presidente, Antonio González, junto a su mujer, Mª Angustias Jiménez –gracias por todo, de corazón–, y su hija Marian, buena representante de la savia nueva de nuestro Corpus , se unirá a Daniel Gil, próximo presidente, para dar ejemplo de convivencia entre mayores y jóvenes, y a nuestra fiesta, la continuidad que necesita.

Y, parada obligada en la Hermandad del Rocío, que aún llevan el aroma de las marismas y que no han querido perderse la oportunidad de seguir compartiendo las cosas que nos gustan. Ángel Fernández, el hermano mayor me contaba cosas del camino, junto a una foto de la barra de promesas, justo una hora antes de que la carreta volcara con esa buena nueva de que nadie resultó herido. La restauración está en marcha, y lo que importa es la buena convivencia, como compartía con la vicehermana Patricia Cervilla; el secretario, Francisco José Rosúa, y luego se unieron otros miembros de la junta como Macarena González, Juan Antonio Vico y Juan Manuel Sáez. Y dos caballistas de lujo, Marina Pozo y Juan Antonio Yeguas, que montaban a Cervecero y Talavante. Preciosa estampa de un precioso día.