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Cultura en Almería | Cine | Entrevista a Manuel Martín Cuenca: «No me van las películas con un mensaje claro, cada uno que extraiga su conclusión»

«No me van las películas con un mensaje claro, cada uno que extraiga su conclusión»

Manuel Martín Cuenca | Director de cine ·

Rodada íntegramente en Jaén, 'La hija' no deja de cosechar éxitos con una historia que plantea un debate sobre la maternidad subrogada

Lunes, 7 de febrero 2022, 22:50

El ejidense Manuel Martín Cuenca, tuvo claro desde el principio que la película 'La hija' era una historia que, por sus propias características, tenía que contarse desde la provincia de Jaén. Así, unió su talento y el de su equipo a los escenarios de la sierra y la ciudad del olivar y el resultado ha sido una película que remueve y que ha sido fuertemente aplaudida por la crítica, triunfando en festivales internacionales y con varios galardones en los premios Carmen y Asecam, además de las nominaciones a los Goya.

–La primera pregunta es casi obligada tras el éxito que está cosechando 'La hija'. ¿Cómo está viviendo estos meses?

–La verdad es que con mucha alegría por el recorrido de la película y también del lugar donde la hemos rodado. Estamos viviendo grandes experiencias y es satisfactorio saber que este éxito está sirviendo para que se hable de Jaén en el mundo, además de la propia historia. Por otro lado, que una película tenga éxito se traduce en nuevas oportunidades para seguir trabajando.

–¿Esperaba que fuera tan bien recibida tanto por la crítica como por el público?

–Siempre que haces una película esperas lo mejor para ella. Sería hipócrita decir otra cosa, a pesar de no ser un cine demasiado comercial. La verdad es que esperábamos que 'La hija' cosechara éxito este año.

–Ahora toca una de las pruebas de fuego más importantes, los Goya, donde también puede ser premiada. ¿Cómo los afronta?

–La verdad es que estoy inmerso estos días en una obra de teatro y con un nuevo proyecto y no tengo mucho tiempo para pensar en los premios. Sí que tengo ganas de que llegue la gala, que estoy seguro será muy emocionante y con ciertos nervios, pero convencido de que se lo llevará otra película. Hasta ahora llevo nueve nominaciones y no he ganado ninguna, pero son muchas y estoy muy agradecido por poder disfrutar esos momentos. Hay que saber ganar, pero especialmente perder.

–¿Cómo de importantes al final son los premios?

–Hay que disfrutarlos y agradecerlos, pero los premios son efímeros. Tienen importancia porque ayudan a seguir trabajando, pero no garantizan nada más.

–¿Qué objetivo perseguía abordando un asunto polémico como la maternidad subrogada y qué mensaje cree que está llegando?

–La película es una historia que reflexiona sobre los personajes y sus sentimientos, pero al final es un cuento. Ahora bien, el mensaje que pueda contener la película debe extraerlo cada espectador porque depende de cada mirada. No tengo una posición personal sobre este asunto, tengo una sensibilidad que es lo que he tratado de reflejar. No se puede reparar una injusticia como la de no poder tener hijos, con otra aún mayor. No me interesan las películas con un mensaje claro y prefiero que cada uno extraiga sus conclusiones personales.

–Aparecen escenarios como la Catedral de Jaén, su cárcel y especialmente un escenario único en plena sierra. ¿Por qué Jaén para esta película?

–Hay dos hechos significativos en lo personal que me llevaron a Jaén. Uno de ellos es que la primera vez que viajé solo, con 8 y 9 años, fue a unos campamentos que se hacían en Santiago de la Espada, con otros compañeros de Almería. Fue un territorio que me pareció mítico y me encantó, por lo que volví, aunque con 53 años. Por otro lado, años más tarde, hubo un tiempo en el que viajaba mucho a la provincia porque mi pareja vivía en Jaén y conocí más de cerca la provincia y a su gente. Es por ambas cosas por las que tenía muchas ganas de rodar en esta tierra y la intuición me hizo pensar que era el mejor escenario para 'La hija'. Además, trabajar con la Diputación ha sido muy fácil y el presidente ha sido muy colaborativo, al igual que el resto de técnicos. Esto es algo muy importante porque me dio mucha confianza ya que nos abrieron las puertas de las instituciones.

–¿En qué cree que ha ayudado grabar en la provincia de Jaén al éxito de la película?

–Los escenarios han sido absolutamente imprescindibles en el proyecto. Jaén es la piel de la película. Hay que tener en cuenta que la piel es un órgano clave para las personas y así ha sido. Hemos escrito la película pensando en Jaén y por eso representa la esencia de 'La hija'. De hecho, no me la imagino en ningún otro lugar y no creo que hubiera tenido el mismo impacto.

–¿Y qué le dicen de la provincia en los distintos lugares en los que se ha presentado la película en el mundo?

–La reacción en Tokio, Toronto y hasta en Sevilla, y te diría que incluso en Jaén, siempre es la misma, preguntar por el lugar donde se encuentran los escenarios en los que hemos rodado. Me hace gracia porque siempre tengo que aclarar los detalles. Tengo que reconocer que me he convertido un poco en guía de espacios naturales en este tiempo... ja ja ja.

–Después de este éxito... ¿Volverá a traer sus cámaras a este rincón andaluz que es Jaén?

–Ojalá, hay un lugar que me ha quedado pendiente porque me encantaría rodar en zonas como los Campos de Hernán Perea y tratar la trashumancia porque me parece un tema impresionante.

–Otro de los puntos fuertes es la canción que lleva al espectador a buscarla tras ver la película. ¿Cómo llega hasta el grupo Vetusta Morla?

–Quería hacer una película naturalista y que la música fuera lo contrario, más electrónica y pensé que de todos los grupos, Vetusta tenía la sensibilidad para esta banda sonora y compusieron la nana. El trabajo ha sido espectacular. Contacté con ellos, hablamos y coincidimos en la forma de trabajar y ellos han tratado la banda sonora con la humildad de los más grandes. Siento mucho que la academia no haya reconocido su trabajo, me resulta difícil de entender.

–¿Cómo le gustaría que recordaran a 'La hija'?

–Como una película que tocó el estómago y removió la conciencia, que sacó de lugar a quien la vio. Una película que no pasó por un mero artificio de entretenimiento, como ocurre con un buen libro y una buena canción. El arte sirve para eso, para dejar pequeñas experiencias en el público y me gustaría que al mayor número posible de espectadores no le hubiera sido indiferente. Así ya me sentiría satisfecho.

–¿En qué otros trabajos está inmerso en la actualidad?

–Estamos inmersos en las primeras representaciones de la obra 'Un hombre de paso' con tres actores andaluces, Antonio de la Torre, Juan Carlos Villanueva y María Morales. Se estrenó el pasado 27 de enero en cinco funciones y fue un éxito de público impresionante porque colgamos el cartel de completo en las cinco. Esta semana estrenamos en Madrid y después comenzará la gira que tendrá parada en Cazorla. Está siendo muy emocionante. Por otro lado, estamos inmersos en los primeros pasos de una nueva película que llevará el título 'El amor de Andrea'. Ahora mismo nos encontramos en la fase de casting.

Viaje por la naturaleza y los sentimientos más primitivos

'La hija' es una película que aborda uno de los sentimientos más primitivos de la humanidad, con la provincia como escenario. Plantea el dilema de la maternidad subrogada desde las dos perspectivas femeninas. El rodaje se ha desarrollado en la capital jienense y en el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas.

Dirigida por el almeriense Manuel Martín Cuenca, está patrocinada por la Diputación de Jáne y protagonizada por Patricia López Arnaiz e Irene Virgüez, junto a Javier Gutiérrez. Desde su estreno, ha cosechado numerosos reconocimientos. De esta forma, fue la absoluta triunfadora de los premios Carmen al conseguir el mejor largometraje, mejor dirección, mejor guion y mejor maquillaje y peluquería. Además, puede que añada algún Goya el próximo 12 de febrero.

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