Las emotivas palabras de María José Díaz, enferma de ELA: «Disfrutad, comed y vivid, que es tan bonito»

«Cuando lleguéis a casa, haceros un bocadillo de jamón serrano con un buen aceite. Sentaros en el sillón, cerrad los ojos y disfrutad del primer mordisco, de cómo cruje el pan». Ese fue el consejo con el que María José Díaz, enferma de Ela y autora de 'Comiendo con ELLA', cerró una emocionante velada en la que el auditorio, el salón de actos del Hospital Universitario San Cecilio, no pudo contener las lágrimas. Lidia, su sobrina, le prestó su voz para leer un vibrante discurso que empezó con un «estoy flipando» y terminó con un hermoso «disfrutad, comed y vivid, que es tan bonito».

La presentación estuvo arropada por Indalecio Sánchez-Montesinos, delegado de Salud; Manuel Reyes, director del Hospital; Jacinto Escobar, presidente del Colegio de Enfermería; y, por supuesto, Socorro Leyva, Marisa Mayorga, Mari Luz Flores, Jorge Abarca... y el resto de miembros y amigos de la Unidad Multidisciplinar Ela (Umela), la unidad que ha hecho posible la edición del libro, los otros grandes y merecidos protagonistas de la velada.

María José recibió una ovación contagiosa, de esas que invitan a aplaudir y aplaudir y no parar. Una ovación que debió ser tan fuerte que llegó a los oídos del mismísimo Alberto Chicote, que sorprendió a los presentes con un mensaje en vídeo: «Qué idea tan brillante, un libro de recetas para los que tienen dificultades para comer. Sigue, sigue adelante. Mucho ánimo», le dijo.

Los asistentes, además, pudieron escuchar uno de los cuentos de María José, su próximo proyecto editorial. Mari Luz, coordinadora de Umela, que la conoce muy bien, cerró el acto poniendo su canción favorita: «Voy a reír, voy a bailar, vivir, vivir, la la la la la...».

María José Díaz celebra todos los días, pero si además es su 52 cumpleaños, la fiesta es inolvidable. Ella es mucho más que una enferma de Ela: escritora, cocinera, esposa y amiga. Entre otras. Su última aventura ha sido escribir 'Comiendo con EllA', un libro de recetas pensado para pacientes con problemas para comer. «Si puedo ayudar a un solo enfermo a comer con seguridad y disfrute, me doy por satisfecha», dice la autora.

Un libro que han impulsado las médicas y enfermeras que forman parte de la Umela, la misma unidad que lleva cuidando de ella desde que conoció su diagnóstico, y que financia el Colegio de Enfermería de Granada. Y así, con tan buenos mimbres, llegó una fiesta inolvidable.