Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Dialogar con la poesía es difícil si lo que se escribe no llega a los lectores. Sin embargo, la invitada del Aula de Cultura de IDEAL del día de ayer, la poeta, escritora, filóloga y traductora literaria Elvira Sastre, supone el caso contrario: sus comparecencias ... arrastran consigo a un buen número de lectores fieles –varios centenares anoche– y sus vídeos en las redes sociales contabilizan millones de visualizaciones. Es por eso que dialogar con ella sobre poesía es una experiencia interesante, tal y como pudieron comprobar quienes acudieron al Centro Lorca en una nueva cita del ciclo de conferencias organizado por el periódico y que patrocina la Obra Social de La Caixa.
El director de IDEAL, Eduardo Peralta, presentó a la invitada leyendo un fragmento de 'Baluarte', su segundo poemario, editado por la editorial granadina Valparaíso, y luego introdujo un diálogo que giró en torno a varios ejes: el origen de su inquietud poética, sus porqués, su forma de entender la literatura, y sus vivencias en este nuevo marco relacional que suponen las redes. Comenzó repasando sus primeras inquietudes literarias, y cómo le emocionaron los primeros mensajes de aquel blog primigenio, 'Relocos y recuerdos', en el que volcó –vomitó, dijo, en algunos momentos– sus primeros escritos.
Sastre se reconoció deudora de las redes. «Me permiten ofrecer al público lo que hago sin intermediarios, y me permitió ser conocida en Hispanoamérica antes de que mis libros se editaran allí. Bien utilizadas, las redes son muy útiles», dijo. Preguntada por Peralta a propósito de si alguna vez pudo ver el lado oscuro de estas, afirmó que «en alguna ocasión ha habido una mala respuesta, pero casi siempre me he sentido respetada y bien tratada». Además de servirle para pulsar la opinión de sus lectores sobre sus escritos, asegura que en alguna ocasión ha habido poemas que le han surgido a partir de historias contadas por sus seguidores por este medio.
Preguntada a propósito de si hay que mudarse a Madrid para triunfar en el mundo literario, la autora afirmó que «a mí me ha ido bien, pero pienso que no es imprescindible. Primero, habría que definir qué es tener éxito, qué es triunfar. En el plano cultural hay muchas ciudades, como Granada, que tienen una vida muy intensa, muy rica. Y se pueden escribir buenas cosas fuera de la capital».
Confiesa no conocer las claves del reconocimiento público, que le acompañó casi desde el primer kilómetro de su carrera. «Creo que es una mezcla de todo: algo de suerte, buenas elecciones, y estar rodeado de amigos y mentores como Benjamín Prado, sin el que mi literatura no sería posible, o sería muy distinta», afirmó.
Otra de las dimensiones de Sastre es la de traductora, y ha tenido entre sus autores traducidos a Oscar Wilde, Gordon McNeer o Rupi Kaur. En este sentido, considera un reto el manejo de las palabras del traductor, con el objetivo de que el lector no note la presencia de este, y no se desvirtúe el mensaje original.
La música también forma parte de su imaginario. Su último gran éxito fue meter a 4.000 personas en el Wizink Center, con el cantautor Andrés Suárez al lado. Entre sus proyectos figura igualmente un disco donde poesía y música convergen. «Nos hemos vuelto un poco locos, pero el resultado es fantástico. Cada tema es una pequeña banda sonora», afirma. Cree que el territorio común de todos los lectores de poesía es el amor por las palabras, un amor que, a tenor de lo visto ayer en el Centro Lorca, ha conseguido inculcar en no pocos jóvenes.
Una de las características de Sastre como autora es la continua búsqueda del enriquecimiento en sus modos de expresión. Por eso se convirtió en columnista de prensa, «donde cuento lo que quiero con libertad, y sabiendo que no soy periodista». Y por ello también otorga un gran valor a las ilustraciones, cuando las hay, de sus obras.
Su presencia constante en las redes y frecuente en los medios de comunicación de masas no ha hecho que el orgullo la fagocite. Afirmó que «tengo muy maltratado a mi ego. Cuando recibo un reconocimiento, un premio, siempre pienso que la reconocida no soy yo, sino mi trabajo. Escribo para no tener que vivir de la poesía, he buscado modos de ganarme la vida sin tener la urgencia de entregar un trabajo para llegar a final de mes», dijo. Durante el animado coloquio posterior al diálogo con el director de IDEAL, confesó haber terminado su próximo libro ayer mismo, en su habitación de hotel de Granada. Quienes hicieron cola para que les firmara ejemplares lo estarán esperando, sin duda.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
España vuelve a tener un Mundial de fútbol que será el torneo más global de la historia
Isaac Asenjo y Álex Sánchez
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.