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Miguel Gil bromea con un euro en su móvil, con la pantalla de bitcoin. ALFREDO AGUILAR

El granadino de las criptomonedas

Miguel Gil, de 24 años, invirtió sus últimos 50 euros del paro en bitcoins y hoy ronda los 100.000. Ha creado una academia que cuenta ya con 300 alumnos de todo el mundo

Sábado, 14 de agosto 2021, 00:31

Un joven con aires de Keanu Reeves se sienta en una cafetería, en el barrio de Los Pajaritos. Viste chaqueta, camiseta blanca, pendientes rojos y unas gafas de sol grandes y redondas. Bebe un refresco de cola sin prisa, concentrado en la pantalla del móvil. Al rato, pide la cuenta y anuncia que pagará con tarjeta. Unos segundos después, el camarero aparece reflejado en los cristales oscuros del joven, como en aquella escena de 'Matrix' en la que Morfeo ofrecía dos pastillas al elegido. En la tarjeta se lee Visa Binance.

–¿Me va usted a pagar con bitcoins? –pregunta el camarero.

–Qué sorpresa. Lo normal es que nadie se fije en la tarjeta. Sí, es de bitcoins, pero hace la conversión automática y tú recibirás el pago en euros –el joven pasa la tarjeta por el lector, confirma la operación y sonríe con cierto desafío al camarero–. Y no te preocupes, que en unos años te pagaré con criptomonedas.

Keanu Reeves es Miguel Gil (Granada, 1996), un joven de 24 años que se define como «una persona normal y corriente a la que siempre le ha gustado muchísimo la tecnología». Con 17 años se fue de casa y empezó a trabajar en «las cosas a las que tienes acceso a esa edad»: en la obra, dependiente, repartidor, camarero... Había realizado dos grados medios, uno en Sistemas Microinformáticos y Redes y otro en Cine de Animación, Videojuegos e Ilustración, pero no encontraba un camino que le motivara realmente. «Cansado de ir y venir, decidí tomarme un tiempo y pensar –recuerda Gil–. Cuando se gastó el paro tenía que inventar algo para vivir».

«Cansado de ir y venir, decidí tomarme un tiempo y pensar. Cuando se gastó el paro tenía que inventar algo para vivir»

Ese algo surgió a finales de 2018, cuando utilizó los últimos 50 euros que le quedaban del desempleo en comprar bitcoins, la criptomoneda por excelencia. «Hay muchas más, pero de eso hablamos después», anuncia. Aquellos 50 euros han crecido hasta los 100.000 después de cuatro años. «Tuve suerte. No es lo mismo empezar cuando el bitcoin valía 3.000 euros que ahora, que vale 30.000 o hace nada, que estuvo en 65.000. Pero nunca es tarde para empezar».

Miguel Gil aprendió tanto en el camino que hace tres meses inauguró su propia academia de formación, Army Cripto, en la que enseña desde cero qué es eso de las criptomonedas, cómo funcionan, en qué invertir y en qué no... «Todo online y desde Granada. Son clases en directo, los lunes, miércoles y viernes. Tengo más de 300 alumnos de todo el mundo hispanohablante, de todas las edades, hombres y mujeres, incluso banqueros». No se trata de un curso, es más un club de formación continua por la que los alumnos pagan 50 euros al mes. Una academia que empezó, por cierto, con un tremendo golpe de suerte. «Pillamos un caso tipo Dogecoin y en dos meses hicimos un mil por ciento de rentabilidad».

Imagen de la Dogecoin.

¿Dogecoin? Les cuento. Dentro de las criptomonedas hay una categoría conocida como 'shitcoins', literalmente, 'monedas de mierda'. Esto son monedas desarrolladas por informáticos amateurs que nacen para hacer la gracia. Un aficionado aprovechó el tirón de un meme, el del perro Shiba Inu, para convertirlo en una criptomoneda: la dogecoin. La moneda empezó a crecer casi como una excentricidad y cuando el creador tuvo dinero suficiente para comprarse un Hyundai vendió todas sus monedas. De haberlas guardado hoy sería multimillonario.

Por mil

Cuando Gil montó la academia no era buen momento para comprar bitcoins, que rondaban los 65.000 euros. «El mercado de criptomonedas funciona por ciclos. En ese momento nació una 'shitcoin', la shiba inu, que nació para derrocar a la dogecoin. La compré a 1.700 dólares y al día siguiente ya valía el doble. Di un punto de entrada a los alumnos de la academia y en dos meses multiplicamos por mil». Sin embargo, Gil considera que aquello fue un caso entre un millón, algo extraño que no es la tónica general. «De hecho, yo no recomiendo nunca invertir en 'shitcoins'. Lo hice por el momento que era. Lo interesante aquí es fijarse en las que tienen un proyecto serio detrás».

Llegados a este punto, uno puede intuir una idea de las criptomonedas pero es más que probable que, honestamente, no entienda absolutamente nada. Hay cientos de criptomonedas pero la líder es el bitcoin.

Miguel Gil, con el logo de Bitcoin en su móvil. A. AGUILAR

¿Qué proyecto serio tiene el bitcoin? ¿Y qué es?

–El bitcoin viene a acabar con el sistema financiero tal y como lo conocemos. Es una moneda digital que va de persona a persona, sin intermediarios, sin nadie que la gobierne, inmanipulable e 'inhackeable'. Nació en 2008 tras la crisis. No sabemos quién es el creador, es totalmente anónimo. Eso crea incertidumbre pero también es positivo porque da a la gente el poder de manejar su economía. Un dinero que viene a deshacerse del poder de los bancos centrales y de la intervención política...

¿Eso es bueno o malo?

–Para mí es bueno que la gente pueda tener el poder de su economía y que cualquier pueda acceder al dinero. Hoy en día hay muchísimas personas que no pueden abrirse una cuenta o la moneda de su país está tan devaluada que no les interesa. Poder hacer transferencias desde cualquier lugar del mundo a cualquier lugar del mundo, sin una persona que cobre comisiones ni controle ni que emita ese dinero.

¿Eso no pasa con los bitcoins?

–No. Bitcoins tenemos 21 millones monedas, no hay más. Cuanto más se reparten, más aumentan el precio. Ya hay bancos que proveen bitcoins, en El Salvador ya es moneda de curso legal, hay grandes empresas que las ofrecen, Elon Musk ha comprado... Es un movimiento imparable.

Imagen -

Pero cualquiera puede crear una criptomoneda, no?

–Sí, es un código de programación. La mayoría de 'shitcoins' están hechas con código abierto, accesible para todo el mundo. Pero no se puede hacer una bitcoin o una ethereum, dos de las principales, así, sin más.

¿Favorecen las criptomonedas las actividades ilegales?

–Es una falacia que sale todos los años. Igual que lo de que China prohibe las criptomonedas. Es mentira. Drogas, prostitución, armas... si haces estas cosas con dinero físico, la policía tiene que montar una investigación muy compleja para encontrar a esas personas. Si lo haces con criptomonedas lo pones mucho más fácil. Vaya, que con dinero puedes comprar cocaína pero con bitcoins, no. Y todo por el blockchain.

En cadena

Bitcoin está dentro de Blockchain que es, básicamente, una descomunal base de datos que se organiza en una cadena de bloques. «Es el mejor medio de almacenar información porque es 'inhackeable'», apunta Gil. ¿Cómo funciona? Imaginen la línea de vida de un bitcoin, como si fuera una cronología. Cada vez que pasa de una mano a otra, se crea un nuevo bloque que se encadena al anterior. «Cada nuevo bloque lleva la información del anterior. Si alguno de los nodos de esa cadena intenta modificar el dato, automáticamente su cadena queda invalidada y se le expulsa. Son miles de millones de ojos mirando esa información».

A. A.

Miguel Gil tiene una inversión repartida entre dos bitcoins y un puñado de otras criptomonedas, con las que compra y vende. «Nunca es mal momento para invertir en criptomonedas. Piensa que ahora mismo no representan ni el 1% de la economía global, por tanto seguimos en una etapa de adopción y queda muchísimo recorrido. ¿Invertir? Es buena idea siempre y cuando lo hagas con paciencia y con el dinero que no te haga falta. ¿Mi recomendación? Ahorrar el 10% de tu sueldo comprando bitcoins. Se ha demostrado que si metes 100 euros todos los meses, en todo el tiempo de vida de bitcoin, no hubieras perdido en ningún momento».

Tras salir de la cafetería, Miguel recorre los Pajaritos hasta entrar a un supermercado. Cuando llega a la caja, el carro está completamente lleno. «Cada vez que voy a hacer la compra me hace falta más dinero para llenar el carro. Con los bitcoins es al revés, cada vez compro más cosas con menos cantidad».

10 preguntas clave para entender las criptomonedas

Le proponemos a Miguel Gil 10 preguntas para entender qué son, cómo funcionan y qué futuro les augura a las criptomonedas. Empezamos:

  1. 1

    ¿Qué es una criptomoneda?

Una criptomoneda es una especie de dinero digital que se aloja en Internet y se basa en matemáticas y en código. La más famosa es el bitcoin, pero hay muchas más.

  1. 2

    ¿Cómo funciona?

Una criptomoneda funciona de una manera muy sencilla. Está alojada en la red y cualquier usuario puede acceder a ellas. Se compran con un clic y todo el mundo puede hacerlo.

  1. 3

    ¿Quién las crea?

Las crean los desarrolladores. Pueden hacer el código público, pero están en manos de los informáticos.

  1. 4

    ¿Para qué sirve?

Una criptomoneda sirve para nosotros tener el poder de nuestra economía, deshacernos de la centralización y poder acceder a este mundo descentralizado que se está creando hoy.

  1. 5

    ¿Cómo obtiene valor?

El valor se lo dan los usuarios. La capitalización de mercado que alcanza una moneda dividida por sus monedas en circulación nos da el valor de la criptomoneda.

  1. 6

    ¿Es peligroso?

¿Es peligrosa una criptomoneda? ¿Es peligroso el dinero tal y como lo conocemos? Entiendo el dinero como una energía y cada persona lo va a utilizar de la manera que considere oportuna. El peligro se lo dan las personas, no la moneda en sí.

  1. 7

    ¿Los países están a favor o en contra?

Hay países que no están a favor y países que sí. El Salvador ha aprobado la ley bitcoin y considera moneda en curso legal. Hasta que todo se regularice, seguiremos así.

  1. 8

    ¿Qué es blockchain?

Es una base de datos pública a la que todo el mundo tiene acceso y todo el mundo puede ver y controlar esa información. Los bitcoins se rigen por blockchain.

  1. 9

    ¿Dónde se guardan?

En una billetera fría o en una caliente. Caliente sería el sitio donde se almacenan en Internet, de manera digital. Una fría es una especie de pendrive donde tenemos criptomonedas guardadas de manera física.

  1. 10

    ¿Puedo comprar el pan con bitcoins?

Sí. Hay tarjetas de crédito VISA y Mastercard que hacen la conversión automática a la moneda en cuestión:euro, dólar, yen... De manera que el comercio recibe dinero 'normal' sin saber que han usado criptomonedas.

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