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Pedro El Granaíno canta en la Torre de la Vela, en la Alhambra. PEPE MARÍN
Día del Flamenco

La llama del flamenco ilumina Granada: «Pensaba en Enrique Morente»

El cantaor Pedro el Granaíno, desde la Torre de la Vela, ha sido uno de los diez artistas que han acompañado al atardecer con su cante, desde Almería hasta Huelva

Miércoles, 16 de noviembre 2022, 20:12

La llama la encendió Rocío Segura a las seis en punto, en el balcón de la Casa de las Mariposas, en Almería. La chispa corrió rápido y, tres minutos después, el fuego ardía en el Castillo de la Mota, en Alcalá la Real, con el buen hacer de Fina de Ángeles. Poco más tarde, a las 18.04 horas, Pedro El Granaíno recoge el testigo del atardecer, en la Torre de la Vela, y se adueña durante un instante de esa antorcha viva. Un instante que dura ciento setenta y cinco segundos. Ciento sesenta y cinco segundos en los que cabe lo jondo del universo.

El Granaíno se coloca en la marca, al borde del ladrillo, frente a miles de ojos que le contemplan a través de las cámaras. Granada, a sus pies, está cubierta por una espesa capa de nubes grisáceas. Entonces cierra los ojos y piensa, por un momento, que hoy es jueves 16 de noviembre de 2022, el día que conmemora el XII aniversario de la declaración del arte jondo como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. O sea, el Día del Flamenco. «Para mí, cantaor y granaíno, estar aquí es algo mágico. Tremendo. Un sueño», dirá más tarde.

«Ay, tri, tri, tri, de la Torre de la Vela», empieza el Granaíno con una voz profunda y sentida que vibra por las piedras de la Alhambra y rebota conforme cae por la ladera del monte hasta tocar el Albaicín. Él es uno de los diez artistas que hoy harán la 'Llamada al Flamenco', una suerte de invocación que recorre diez lugares emblemáticos de Andalucía al ritmo de la puesta de sol.

PEPE MARÍN

«Hay un caminito largo, del querer al no querer, hay un caminito largo», sigue el Granaíno, con los brazos en alto y los dedos tan estirados como las sombras que se dibujan en el horizonte. «Cantar aquí, hoy, me ha producido muchas sensaciones, mucha emoción –explicará dentro de unos minutos–. Cantaba y pensaba en Enrique Morente, en Camarón, en Tomás Pavón... en todos los que no están con nosotros. Pensaba en Granada».

«Tengo el corazón encogío»

«El más hermoso cantar...», canta el cantaor, coincidiendo con los primeros destellos de las luces que se encienden a lo lejos, como estrellas titilantes que se contagian por San Nicolás, por el Paseo de los Tristes, por Gran Vía, por el Zaidín... pequeños chispazos que confirman que la noche ha llegado. «Este es el más hermoso cantar, el flamenco y la humanidad», termina el Granaíno, ciento sesenta y cinco segundos después, con las manos temblorosa por el frío y por el flamenco. «Tengo el corazón encogío –dice, mientras los presentes le aplauden la actuación–. ¡Qué nervios! Pero, uff, qué bonito esto», resopla moviendo el brazo de un lado a otro de Granada, como el músico que pide una ovación para la banda. Luego se restriega el ojo con la mano y se limpia una lágrima.

Es de noche en la Torre de la Vela y la antorcha va hacia el oeste, de camino a Huelva, donde la llama llegará a puerto y la voz quedará clara. «¡Viva el flamenco!», exclama alegre la directora general del Patronato de la Alhambra y el Generalife, Rocío Díaz.

El Día del Flamenco

Judit Urbano, en el Hospital Universitario Clínico San Cecilio. IDEAL

El flamenco se celebró ayer por toda Granada con decenas de actividades en todo tipo de centros. Es el caso del IES Cartuja, centro pionero en la inclusión del Flamenco en las aulas. Durante este curso escolar, ha contado con Bachillerato de Música y Artes escénicas de adultos –el único en la provincia– en el que se imparte además una asignatura de diseño propio, Historia del Flamenco. Ayer, la delegada de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, María José Martín, junto al delegado territorial de Turismo, Cultura y Deporte, Fernando Egea, y el director del Instituto Andaluz del Flamenco, Cristóbal Ortega, visitaron el centro para mostrar su apoyo a esta iniciativa formativa.

Y en el aula educativa del Hospital Universitario Clínico San Cecilio celebraron el Día Internacional del Flamenco con un taller musical impartido por la cantaora Judit Urbano. El objetivo era dar a conocer los diferentes palos que existen dentro del flamenco para lo que, además de explicarlos de un modo sencillo, han interpretado algunos de ellos para que los menores hospitalizados y sus familias pudieran aprender a diferenciarlos.

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