Puerta de los Siete Suelos de la Alhambra, situada enfrente del Hotel Washington Irving. PEPE MARÍN

Los misterios de la puerta de la Alhambra por donde se exilió Boabdil

Granada Arqueológica ·

La Puerta de los Siete Suelos, construida por Yusuf I, no formaba parte del diseño original del conjunto palatino alhambreño

Domingo, 19 de septiembre 2021, 00:16

La Alhambra tenía varias puertas de acceso que permitían la comunicación de Granada con los distintos espacios de la ciudad palatina; la puerta de las Armas, la Puerta de la Justicia y la que conocemos como la Puerta de los Siete Suelos. Es un complejo ... arquitectónico formado por dos edificios distintos: una puerta nazarí y un baluarte artillero de la época de los Reyes Católicos que hoy hace difícil su comprensión como acceso. En época nazarí se llamó Bab al Gudur, o puerta de los pozos y la actual denominación, que en origen hacía referencia exclusivamente al baluarte, se hizo extensible a todo el conjunto partir del siglo XVII-XVIII debido a una de las leyendas que atribuía la existencia de siete sótanos, impracticables los últimos por arte de magia.

Publicidad

Pero antes de entrar en los aspectos más legendarios del sitio es conveniente que aclaremos que su nombre lo recibía porque la explanada que había a sus pies estaba ocupada por numerosos silos y mazmorras diseminados por toda la ladera, conocida como el Campo de los Mártires. Realmente era la puerta principal de la ciudad palatina conectando con el barrio de artesanos y con la calle Real. En su exterior solían celebrarse paradas militares, como la organizada en 1477 por Muhammad X, acondicionando la zona para la tribuna del sultán. Otros autores sugieren que este espacio también era escenario de justas y torneos entre caballeros. Finalmente sostiene la tradición que fue ésta por donde salió Boadbil de la Alhambra camino de su exilio tras la capitulación de Granada, pidiendo que fuera clausurada desde entonces.

Se abre en el flanco meridional de la muralla de la medina y está compuesta por dos torreones que flanquean el arco de acceso. Éste es de mármol blanco con forma de herradura, conchas abiertas en las albanegas y sobre la clave, en la que hay labrada una llave –símbolo de la dinastía nazarí– estando rematado todo el conjunto con un dintel adovelado. El acceso es en recodo, con rampa ascendente que conduce al arco de salida, conectando con el camino de ronda intramuros y con la calle Real de la Alhambra. En el espacio de tránsito existen varias estancias para la guardia.

Yusuf I

Su construcción se atribuye al sultán Yusuf I, fechándola a mediados del siglo XIV, pero lo cierto es que las excavaciones arqueológicas que se han hecho en su entorno solo pueden demostrar que no formaba parte del diseño original de las murallas y puertas del conjunto palatino, trazadas en el siglo XIII de modo que para su apertura fue necesario remodelar la muralla. Es probable que la necesidad de su construcción tenga que ver efectivamente con la expansión extramuros de la ciudad de Granada, la formación de los grandes arrabales meridionales –los de Nayd y los Alfareros– y su amurallamiento, atribuido a Muhammad II.

Publicidad

Ficha técnica

  • Localización Alhambra. Secano.

  • Descripción Puerta de acceso a la medina de la Alhambra desde el sur, con dos torreones de flanqueo, arco de herradura puntada y acceso en recodo.

  • Cronología Baluarte del siglo XV-XVI.

  • Tipo de protección Forma parte del conjunto monumental de la Alhambra y Generalife.

Tras la conquista de los Reyes Católicos se construyó delante un baluarte artillero que forma parte del programa de mejora de las defensas del flanco meridional de la Alhambra, emprendido a partir de enero de 1492. Está formado por un cubo de dos plantas, ambas cubiertas con bóvedas de cuarto de cañón y anular respectivamente, con un gran pilar de tapial en el centro que sirve de eje. Conserva dos escaleras de acceso y evacuación en los extremos noreste y noroeste y las torneras están dispuestas de forma estratégica para la defensa del foso y escarpa. Queda coronado con una azotea con claraboyas que permite alumbrar escasamente la primera planta mientras que la segunda solo podía hacerse por medio de luz de antorchas.

Nombre popularizado en el siglo XVIII

El nombre moderno de 'siete suelos' ya se conoce desde el siglo XVII, pero se popularizó en el siglo XVIII a partir de los relatos que el padre Echevarría recogió en sus paseos por Granada, que alimentaron las leyendas sobre el lugar. El escritor Washington Irving también las incorporó en sus 'Cuentos de la Alhambra' y las dio a conocer al mundo entero. Hay varias de ellas que hablan de la existencia de siete sótanos, inaccesible el último de ellos, con ligeras variantes: defendido por un gigante etíope para unos o por un ejército moro para otros, que custodian un tesoro. También se decía que era la guarida de un caballo descabezado encantado que salía algunas noches por el bosque de la Alhambra, o del Velludo, bestia de reminiscencias mitológicas, mitad humano mitad animal.

Publicidad

Realmente solo tiene las dos plantas descritas, pero algunos eruditos en el siglo XIX se dejaron llevar por el misterio romántico que envolvía el edificio y afirmaban que tenía tres o cuatro sótanos o que incluso algunos estaban convencidos de la existencia de un túnel que tenía su salida en el castillo de Bibataubín, a orillas del Darro.

Lo cierto es que parte de esas historias fueron inventadas por los contrabandistas que usaron el baluarte para ocultarse de las autoridades de la ciudad, y en 1747 se ordenó que fuera tapiada. Tampoco podemos ocultar que parte del carácter misterioso tiene que ver con algunos hechos macabros que sucedieron en este lugar y que alimentaron la imaginación popular: en 1595, siendo teniente alcaide de la Alhambra don Diego Ponce de León degolló a su mujer y dos hijos, dejando los cuerpos en el baluarte.

Publicidad

La puerta y el cubo artillero fueron fortificados por los franceses a principios del siglo XIX y en su retirada, en 1812, fue destruido parcialmente. En 1846 se construyó una taberna en la azotea donde ya se organizaban zambras para los turistas y a los pocos años se levantó el hotel Siete Suelos justo delante, quedando completamente oculto. La puerta de Siete Suelos que contemplamos hoy es producto de la restauración dirigida por Modesto Cendoya en 1913 y a partir de 1937 Francisco Prieto Moreno y Jesús Bermúdez Pareja comenzaron un largo proceso para su recuperación definitiva.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad