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Proceso de excavación del muro tras su aparición en 2005. IDEAL
Granada Arqueológica | En las entrañas del parking del Violón: las primeras obras de ingenería medieval en Granada capital

En las entrañas del 'parking' del Violón

GRANADA ARQUEOLÓGICA ·

Los restos que hay en el interior del aparcamiento forman parte de un tapial que se levantó a principios del siglo XIII por los almohades para contener las crecidas del río Genil y proteger las huertas que había extramuros de Granada. Esta es la historia de unos restos arqueológicos desconocidos por numerosos granadinos

ANGEL RODRÍGUEZ

Domingo, 27 de octubre 2019, 00:29

Para muchos decir arqueología en Granada es sinónimo de obra parada, meses de incertidumbre, caos y conflicto entre políticos. En gran medida se lo debemos a dos grandes intervenciones que tuvieron lugar a mediados de la década del 2000: la ampliación del aparcamiento de la Avenida de la Constitución, en el Triunfo, y la construcción de otro en el Paseo del Violón. Vamos a conocer qué sucedió en aquella segunda obra y qué significan los restos arqueológicos que hay en su interior, ignorados o desconocidos para la mayor parte de los granadinos.

Muchos, cuando caminan por el Paseo del Violón y se asoman a la pérgola central que hay en el primer tramo, se sorprenden al ver que debajo de sus pies, a una profundidad de unos tres metros desde el paseo, se ve un largo muro, que parece una muralla, justo en medio del aparcamiento. Una vez en su interior se convierte en una gran estructura lineal de la que sobresalen tres apéndices de planta triangular. Su fábrica y su antigüedad nos previenen de que, efectivamente, estamos delante de unos restos arqueológicos de los que lamentablemente el espectador poco sabe.

Estado actual de los restos arqueológicos. IDEAL

Lo que se conserva en el interior de este aparcamiento –que lo hace sin duda alguna tan singular– son los restos de las primeras grandes obras de ingeniería civil que se hicieron en la Granada medieval para domesticar el cauce del río Genil. Son los muros de contención levantados por los reyes ziríes y los almohades entre el siglo XI y principios del XIII.

Historia del descubrimiento

En octubre del año 2005 comenzaron las obras para la construcción de un aparcamiento subterráneo en el paseo del Violón, que se entendía entonces –y ahora– como una infraestructura necesaria para poder descongestionar el tráfico por el centro. Dado que el lugar elegido se encontraba fuera del ámbito de protección arqueológica del casco histórico, las excavaciones comenzaron sin un estudio arqueológico previo. Pero a los pocos días de que las máquinas iniciaran el destierre, en la zona central del paseo apareció un largo y potente muro que parecía mucho más antiguo.

Rápidamente se paralizaron las obras y se dio paso a una excavación arqueológica que se prolongó durante unos meses, compaginándose con la continuación de parte de aparcamiento. Tras los primeros trabajos los arqueólogos comprobaron que se trataba de un muro de contención de la margen izquierda del río Genil con más de cincuenta metros de longitud en pie y otros tantos derrumbados sobre el antiguo cauce, en el que se podían observar que existían al menos tres fases constructivas diferenciadas en el tiempo, jalonado por tres tajamares.

Diferentes imágenes del río Genil, a la altura del Violón, a principios del siglo XX. ARCHIVO HISTÓRICO MUNICIPAL DE GRANADA
Imagen principal - Diferentes imágenes del río Genil, a la altura del Violón, a principios del siglo XX.
Imagen secundaria 1 - Diferentes imágenes del río Genil, a la altura del Violón, a principios del siglo XX.
Imagen secundaria 2 - Diferentes imágenes del río Genil, a la altura del Violón, a principios del siglo XX.

Conservaba un alzado de casi tres metros de altura y una anchura de 1,20 metros. Era por tanto una construcción muy similar a las murallas urbanas, pero en este caso adaptada a la función de consolidación de la margen del río en la zona más inestable y peligrosa, que era el punto de confluencia del Darro con el Genil, aguas abajo del puente.

Al constatar la importancia del hallazgo, primero por ser inédito y segundo por la magnitud de la construcción, la Consejería de Cultura lo declaró Bien de Interés Cultural en 2007, quedando integrado la mayor parte dentro del aparcamiento, tal como lo vemos hoy.

Primeras obras de ingeniería de la Granada islámica

Si entramos en el aparcamiento podemos ver de cerca este monumento, observando a simple vista varias cosas: su cara exterior, es decir la que se encontraba en contacto con el cauce del río, es la referencia histórica de hasta donde alcanzaba el Genil en el siglo XI; está muy erosionada y se puede comprobar que se trata de una construcción hecha de tapial. Sin embargo, por el interior, al no haber estado sometido a la erosión histórica del paso de agua, se aprecia con total claridad las huellas del sistema constructivo, de los tableros, clavos, cuerdas… y la cimentación que se excavó en el mismo lecho del río. Esta gran obra de ingeniería se prolonga aguas abajo hasta la ermita de San Sebastián y aguas arriba hasta el puente –mal llamado– romano.

Estos restos representan las primeras grandes construcciones de ingenería civil de Granada

Pero también se puede ver que no se trata de un muro homogéneo: existe una parte más antigua que se fechó en el siglo XI y después una gran reconstrucción que llevaron a cabo los almohades a principio del siglo XIII cuando ampliaron y reformaron el antiguo puente del Genil y aseguraron la margen izquierda del río para poder fundar una almunia real, el Alcázar Genil, estabilizando la ribera y creando un paseo de acceso, del que es heredero el actual del Violón, en un espacio que gozaba ya de gran prestigio en la Granada islámica.

Construcción del aparcamiento. IDEAL

Cuando los ziríes decidieron trasladar la capitalidad desde Medina Elvira a Granada a principios del siglo XI se produjo en muy poco tiempo una gran expansión urbana, ocupando rápidamente la colina del Albaicín y la parte llana más próxima, donde se construyó la Mezquita Mayor y se levantaron sólidas murallas. Fuera, hasta el cauce del río, todo estaba ocupado por huertas. En este espacio extramuros se hizo necesario estabilizar las orillas del río, en un lado con la plantación de la alameda conocida como de Muammal, liberto del rey Badis a quien se atribuye su fundación, hoy jardines del Salón. Pronto se convirtió en uno de los lugares de recreo preferido de los granadinos, fuera de la medina, lejos de las miradas indiscretas pero cerca de sus puertas. En las zonas más inseguras hubo de recurrir a estas primeras grandes obras de ingeniería que resistieron eficazmente el paso del tiempo.

En 1886, a causa de unas fuertes lluvias, se arruinó parte del muro y el ayuntamiento de Granada procedió a su reconstrucción, utilizando los restos del antiguo muro árabe, añadiendo tres tajamares. Son los tres apéndices triangulares que sobresalen, cuya función era la de romper la virulencia del agua en la zona de contacto de los dos ríos, minimizando el impacto y la erosión. En la obra se emplearon cincuenta trabajadores durante un periodo de tres meses, paliando en cierta medida la asfixiante crisis económica que se cernía sobre las clases trabajadoras. Como vemos, el fomento de obra de carácter público siempre ha sido un buen recurso para emplear masivamente mano de obra en momentos difíciles.

Protección de los restos durante la construcción del aparcamiento. JESÚS PUERTAS

Las obras de reforma del cauce del Genil de los años 90 del siglo XX terminaron por ocultar el antiguo muro de contención construido hace ochocientos años, reduciendo definitivamente el cauce del río a su estado actual. Hasta que no fue redescubierto en 2005 solo nos quedaba el recuerdo en numerosas fotografías históricas pero hoy es uno de los elementos arqueológicos de mayor entidad que se han recuperado para la ciudad.

Ficha técnica

  1. 1

    Localización. Paseo del Violón S/N. Aparcamiento subterráneo

  2. 2

    Descripción. Muro de contención del río Genil en su encuentro con el Darro construido en tapial en la época almohade, a principios del siglo XIII. Se trata de una obra de acondicionamiento de la margen izquierda para su urbanización posterior. La técnica constructiva es un tapial de arenas de río mezcladas con cal, utilizando un encofrado de madera. Es una construcción muy fácil de ejecutar y que muestra una gran resistencia ante la erosión que produce el agua. El muro está protegido por cuatro tajamares –construcciones que permiten romper la fuerza del río–. La obra conectaba por un lado con el puente del Genil y por otro, con la ermita de San Sebastián, antiguo morabito.

  3. 3

    Cronología. Siglo XI, principios del siglo XIII (almohade) y finales del siglo XIX (1886-1887).

  4. 4

    Tipo de protección. Por la singularidad del hallazgo, fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) de Andalucía con la categoría de Monumento. Esta figura de protección obliga a la conservación y mantenimiento del bien para el disfrute de los ciudadanos. No se realizó ninguna labor de restauración posterior a la obra y los restos se pueden observar desde el interior y desde el exterior del aparcamiento.

  5. 5

    Acceso. El acceso es libre y se puede ver en coronación desde el propio paseo del Violón o en el interior accediendo al parking público. No existe ningún tipo de información adicional en el monumento.

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