El rock y el pop granadino vuelve a retumbar en la Sierra

El Festival de Pradollano se anuncia como el festival más elevado de Europa (a 2.100 metros de altitud), y probablemente junto con las muestras cordilleranas de música andina sea uno de los más altos del mundo. Hasta la fecha ha dedicado su interés al producto de cercanía, programado mayormente a grupos españoles, con significativa presencia del censo local, que este año se ha convertido en proveedor prioritario de su programa.

Siguiendo la tradición, de tres grupos por sesión y de estilos variados para no aburrir al personal, la noche del viernes 20 de agosto se asomarán desde el escenario de la Plaza de Andalucía los grupos Pelomono, Unidad y Armonía, y Colectivo Da Silva; mientras que el sábado será el turno de Uralita, Mama Baker y como 'estrella invitada' el sevillano Andrés Herrera 'Pájaro'.

Nada más variado que el programa inaugural, con el paleorockandroll de Pelomono, la banda paralela del guitarrista de Guadalupe Plata, Pedro de Dios, que estos días precisamente se presentaban al público madrileño también. Tras las máscaras simiescas y su crudeza sónica llegará la psicodelia pop de los preciositas Unidad y Armonía, con Miguel Martín 'Migueline' al frente de un elenco de compañeros de primera línea escoltándolo. Y nada más opuesto al comienzo de la noche, que su final, con el Colectivo da Silva, banda mutante y siempre sorprendente por su desparpajo caleidoscópico.

El punk de Alba Mateos y sus Uralita pondrá en funcionamiento el fin de fiesta, que tendrá como protagonistas a los intermitentes Mama Baker, que esta temporada excepcionalmente se han dejado ver ya en dos ocasiones en lo que va de año; clausurando la muestra Pájaro con su evocador espagueti rock semanasantero.

Como es tradicional en este festival serrano, la convocatoria se acompaña de una oferta muy bonificada de estancias hoteleras para poder pernoctar en las alturas.