El Covirán se queda sin rival

El baloncesto español está afrontando uno de los cursos más complejos que recuerda, si no el que más. En ese sentido, el Canoe es probablemente uno de los equipos más afectados en los últimos días. Aparte de sus problemas en la clasificación, donde es colista con un triunfo en once encuentros, el equipo de José Rey está viviendo todo tipo de experiencias.

A finales de noviembre, un primer caso por coronavirus positivo en la plantilla ya le obligó a aplazar dos encuentros, en Lleida y ante Girona en Madrid, que de momento sigue sin recuperar. Más tarde, fue seguramente el club español más afectado por el temporal 'Filomena', que coincidió con su desplazamiento a Huesca en unas condiciones ya bastante complicadas, pero que nada tuvieron que ver con las del regreso: tan dantesca era la situación tras el duelo que los canoístas se vieron atrapados en Zaragoza y, tras jugar el viernes 8 de enero en tierras oscenses, no regresaron a Madrid hasta la noche del domingo 10. Pero todo era susceptible de complicarse más. La copiosa nevada en Madrid bloqueó los accesos al pabellón de Pez Volador e hizo que el Canoe apenas pudiera entrenar un día esa semana antes de recibir al Almansa, con el que perdió por 79-87 en un partido que fue un auténtico foco de infección. Tras el mismo, se supo que hasta doce integrantes de los manchegos y tres en los madrileños dieron positivo, obligando al aislamiento y afectando de lleno al Covirán Granada, necesitado de aplazar la cita ante el Almansa.

El Canoe salía de su aislamiento este jueves con la intención de jugar sí o sí hoy en Granada, pero un nuevo positivo en los nuevos tests le obligaron a mantener el parón, al tratarse de un jugador que convive con varios más, debiendo poner a todos en cuarentena.

El modesto proyecto del Real Canoe cuenta este año con uno de los nombres más rutilantes de la LEB Oro. Se trata del ala-pívot británico Daniel Clark, internacional con su país y que, tras pasar por la cantera del Estudiantes, ha participado en las catorce últimas temporadas de la Liga ACB, militando en seis equipos distintos además del colegial. Todo un clásico de la máxima competición española que, tras no encontrar acomodo allí, decidió firmar este curso por el club de la calle Pez Volador apenas tres días antes del inicio de la temporada. El objetivo, ayudar a los madrileños en la lucha por la permanencia y, desde luego, mantenerse en el escaparate por si surgía la opción de regresar a alguna primera europea.

Pero las cosas no le van bien de momento al de Greenwich. Clark ostenta los mejores números de los amarillos, con 13'4 puntos y 5 rebotes por partido y un 34% de acierto en el triple, la que es una de sus grandes señas de identidad. Sin embargo, el Canoe es colista destacado del grupo B de la LEB Oro con una sola victoria y diez derrotas.

Hace unos días se paralizó el fichaje del inglés por el Coosur Betis de la ACB. Tras el visto bueno de Joan Plaza, todo parecía arreglado para su incorporación a los sevillanos, mermados en la posición de '4'. Empero, los casos positivos en el Canoe evitaron que la operación se acabara cerrando y, de hecho, se mantiene en un 'impasse' mientras Clark concluye su cuarentena y los béticos siguen necesitando un ala-pívot. De momento, ninguno de los objetivos del exestudiantil se está cumpliendo este curso.