Eloy Almazán va a ser la única baja del Covirán Granada en el partido de este fin de semana. El alero granadino se ha visto obligado a parar y estará en el dique seco dos semanas como mínimo. Acusa una calcificación en un pie, que le produce muchísimo dolor, incluso para andar. El cuerpo médico ha decidido que no debe continuar haciendo esfuerzos y que lo mejor es que no juegue entre dos y tres semanas, aunque el jugador ya ha mostrado su voluntad de regresar antes de ese plazo.
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Sí va a poder jugar Joan Pardina, pese a que padece una fisura bastante importante en un dedo de un pie, causada por estrés después de los esfuerzos acumulados de jugar con esos problemas durante varios partidos continuados. Pablo Pin recuerda que «también nos aconsejan pararlo, pero él no quiere y va a jugar infiltrado tanto este partido ante el Retabet Bilbao como el siguiente en Cáceres, y después ya veremos si hay que parar unos días».
El entrenador del Covirán Granada considera que estas lesiones se han producido de forma fortuita. Apunta que lo de Joan Pardina le sobrevino «tras una caída, lo que le provocó daño en el dedo de un pie, que después se mantuvo al seguir jugando durante todo este tiempo, y lo de Eloy Almazán fue también por una caída que tuvo en el partido que jugamos en Mallorca. Hay que adaptarse a todo eso y otros jugadores deber de ver que esto es una oportunidad para ganar minutos. Vamos con once y con ilusión por ganar. Hasta ahora habíamos tenido suerte. El trabajo físico que se hace con los jugadores es bueno y no habíamos tenido lesiones».
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