Will Barton quiere volver por sus fueros en el Covirán. Pepe Marín

Entrevista a Will Barton

«Mis expectativas siempre fueron más altas que las que los demás pusieran en mí»

Tras doce temporadas en la opulenta NBA, el nuevo escolta del Covirán afronta un reto nuevo: ayudar a una permanencia

Miércoles, 27 de marzo 2024, 13:07

Cuando IDEAL adelantó el fichaje de Will Barton por el Covirán, pocas reacciones tuvieron término medio. Entre los que piensan que dominará la Liga Endesa solo por el hecho de haber jugado doce temporadas en la NBA y quienes sospechan de su nivel tras casi ... un curso sin jugar, hay que bucear en los grises de por qué quien ha ganado 81 millones de dólares jugando al baloncesto abre ahora una etapa en la que el reto es salvar la categoría. Aquí, su primera entrevista desde que llegó a España.

Publicidad

–¿Qué tal por Granada?

–Pues la verdad es que muy bien. Me gustan el clima y la gente.

–El clima no es como en Denver.

–¡No! (risas). Es muy diferente. Aquí es mucho más cálido. De momento, lo disfruto.

–¿Y el equipo?

–Pues veo muchas grandes personas, tío. He notado que me han recibido con los brazos abiertos, ayudándome a adaptarme, a integrarme en el sistema de juego. Creo que es un gran grupo.

–Tras toda una vida en la NBA, ¿qué esperaba de esta liga y qué se encontró el sábado?

–Verás, yo suelo ser alguien de mente abierta, que no pone las expectativas ni muy arriba ni muy abajo cuando hace algo por primera vez. Prefiero ir con la mente receptiva y ver lo que se plantea por delante. Vi un juego profesional, de muy alto nivel, muy rápido, físico y desde luego de mucha exigencia competitiva.

Publicidad

–Se dio una circunstancia: se enfrentó a uno de los equipos más físicos, no ya de España, sino de Europa, como Unicaja. Todo un reto para estrenarse.

–Sí, desde luego, pero me gustan ese tipo de retos y estoy deseando que lleguen más.

–Está acostumbrado a jugar con los mejores. ¿Cuál es su objetivo bajando un peldaño y en un equipo que le necesita?

–Lo que quiero es salir a la cancha y seguir siendo competitivo. Seguir mejorando y ayudando y haciendo mejores a mis compañeros. No he jugado un partido oficial en casi un año, así que tengo que descubrir bien cómo estoy e ir haciendo mejoras progresivas en cada partido. No es algo que vaya a pasar en un minuto o de un día para otro. Tengo que ser paciente conmigo mismo, pero creo estuve a un buen nivel para llevar un año sin jugar, especialmente sabiendo el equipo contra el que jugábamos.

Publicidad

–Sobre eso, tras un año, ¿cuál es su estado de forma físico y mental?

–Sigo trabajando para recuperar mi mejor forma. He trabajado mucho, pero jugar un partido oficial es una cosa muy distinta a un entrenamiento individual. Sigo trabajando para fortalecer mis piernas, para alcanzar el ritmo al que puedo jugar. Como le digo, es un proceso, pero creo que el sábado me encontré bien para ir en la dirección correcta.

–Supongo que el reto es estar en Euroliga, o incluso en la NBA, la próxima temporada. ¿Necesita demostrar en estos nueve partidos en Granada que está listo?

–Mi objetivo es recuperar totalmente la forma, mejorar mi nivel y ayudar a este equipo a ganar partidos. Sobre lo que pase cuando acabe la temporada ya pensaré, pero he jugado once años en la NBA, no creo que tenga que demostrarle mi nivel a nadie en el mundo. No tengo nada que demostrar sobre mi capacidad de juego. Una vez que estoy en plena forma, puedo jugar en cualquier lugar del mundo.

Publicidad

–¿Cómo fue el momento en que escuchó Granada por primera vez y qué pensó?

–Simplemente le diré que fue emocionante para mí. Poder jugar al baloncesto de nuevo. Sabía que estaba en España, que es un lugar maravilloso, así que estaba emocionado y deseando poder volver a jugar. Soy alguien que trata de no darle muchas vueltas a la cabeza, simplemente me sentí afortunado por la oportunidad.

–Quiero decir que tras firmar en enero por el CSKA, uno de los mejores equipos de Europa, ¿quizá le chocó la opción de jugar por evitar un descenso?

–Mi impresión fue que quería ayudar. Que tendría que dar mi máximo para que este equipo consiga su objetivo. No creo que haya un lugar que sea mejor que cualquier otro para jugar. Nunca lo he pensado en mi carrera.

Publicidad

–Con una gran carrera en la NBA, y habiendo ganado mucho dinero, ¿qué le llevó a aceptar esta oferta?

–Porque sigo siendo joven. Acabo de cumplir 33 años y creo que sigo teniendo cosas que darle a este juego. Y como pienso que puedo seguir jugando a alto nivel durante unos cuantos años, acepté. No importa el lugar o el objetivo. Quiero jugar. Granada me ha aceptado, me ha dado la bienvenida con los brazos abiertos y aquí estoy.

–Dígame, ¿por qué es tan distinto el juego a este lado y al otro del Atlántico? ¿Qué claves ve?

–¡Solo en jugado un partido aquí! Pero de ello diría que... (se toma su tiempo) quizá el juego es un poco más rápido aquí. Desde luego tengo que jugar más partidos para contestar a esto.

Noticia Patrocinada

–¿La defensa cambia mucho?

–¡Sí, esa es la principal diferencia! Aquí la zona está mucho más ocupada que en la NBA, donde hay más espacios por la norma de los tres segundos defensivos.

–¿Cómo fue su infancia en Baltimore y cómo empezó a jugar?

–Empecé a jugar con seis años. Primero en la calle, claro. Siempre he adorado este juego, desde que tengo uso de razón. Poco después empecé a jugar de forma reglada en mi ciudad y ya nunca más dejé de hacerlo.

Publicidad

–¿Tenía un ídolo o un equipo favorito en esa época?

–Creo que no, no tenía un ídolo, simplemente me encantaba jugar. Luego, una vez que crecí y empecé a entender mejor todo, Kobe Bryant fue referente.

–Fue una estrella ya en el instituto. ¿Cómo es lidiar con todo eso siendo adolescente?

–Siempre he estado centrado en el baloncesto, y en lo que esperaba de mí mismo. Así que lo que dijeran los demás nunca me afectó, porque mis expectativas siempre fueron más altas que las de los demás pudieran poner sobre mí. Realmente amo el baloncesto, siento pasión por él. Salía y jugaba sin pensar en eso porque hacía lo que amaba.

Publicidad

–Le leí que antes de llegar a la NBA se veía parecido a Jamal Crawford. ¿Sigue pensando eso? ¡Yo creo que usted defiende más!

–Me encanta Crawford, un gran jugador. Le observé y estudié mucho. Pero sobre mí, diría que no me comparo ahora con nadie, tengo mi estilo propio por mi versatilidad. En algunos partidos soy el máximo anotador, pero también puedo ser un generador, o un buen defensor. Ayudo en el rebote. Nunca estuve centrado en una parte de mi juego, porque creo que puedo hacer muchas cosas en la cancha. Por eso no me comparo con nadie, porque cada noche puedo parecer un jugador distinto.

–Fue una pieza clave en la construcción de estos Denver Nuggets campeones. ¿Se sintió parte del anillo que ganaron hace unos meses?

–No diría eso, porque realmente no estaba allí cuando lo ganaron (sonríe), pero desde luego sí me siento parte de ese crecimiento del equipo. En ayudarles desde que llegué a convertirlos, cuando me fui, en uno de los mejores equipos de la NBA. Sí, fui una parte del crecimiento y el éxito del equipo.

Publicidad

–Aparte de anotar, su papel en defensa era relevante.

–Sí, como te digo. Creo que era un líder emocional, alguien con quien los compañeros podían hablar y que trataba de aportar en los dos lados de la cancha. No diré que era la pieza clave en defensa, pero, desde luego, aportaba.

–¿Cómo es jugar en el mismo equipo que Nikola Jokic?

–¡Oh, él es el mejor, simplemente! Tiene un talento... y es tan generoso y dominante... Ver sus inicios y comprobar dónde está ahora, haber podido compartir equipo con él, es algo que nunca podré olvidar.

–¿Y jugar contra él?

–¡Pues jodido! Es una bestia...

–Su último equipo en la NBA fueron los Washington Wizards. Al ser de Baltimore, ¿fue especial?

–Sí, porque es la franquicia más cercana a mi casa y eso permitió que mi familia y muchos amigos pudieran venir a verme jugar.

–¿Sigue la NBA siendo una puerta abierta?

–Claro, todas las puertas siguen abiertas para mí ahora mismo porque mi camino continúa y quiero seguir jugando. No descarto nada y creo que podría volver en algún momento. Pero ahora me centro en Granada, ya veremos qué es lo siguiente.

Publicidad

–El 30 de noviembre de 2017 firmó su máxima anotación NBA. ¡37 puntos contra los Chicago Bulls de Cristiano Felicio!

–¡Sí, no pudo pararme! (risas). La primera vez que le vi aquí le dije: '¿te acuerdas del partido?'. Él sonrió, claro. Los dos nos acordamos, obviamente. Además, metí la última canasta para ganar...

–Dígame, ¿qué pasó en Rusia?

–(Se lo piensa) A ver, no es algo de lo que quiera hablar mucho...

–Hablaron de un potencial problema cardiaco para romper el contrato. ¿Le preocupa eso?

–Estoy sano, no es algo que me preocupe. Ya ha visto que jugué el sábado. Me siento bien, no es algo que me preocupe.

–¿Ha notado la diferencia entre un equipo de abajo en la NBA y en Europa? Aquí cada derrota pesa más y ese riesgo del descenso pesa.

–En la NBA jugué en equipos muy buenos y en otros que no tanto. Eso que dices es un desafío para mí. Durante toda mi carrera he tomado este tipo de retos, y ahora no es diferente. Desde que empecé a jugar al baloncesto ha sido así y, como te digo, lo acepto. Estoy comprometido para tratar de ayudar a ganar.

–Lo que quiero decir es que aquí la derrota es más dramática.

–Sí. Llevo mucho tiempo jugando a esto y trato de controlar esas emociones. Realmente, no siento presión cuando estoy en una cancha de baloncesto. No siento esos dramas, trato de que no me afecten. Simplemente juego.

Publicidad

–Terminemos ya. ¿Cómo es Will Barton fuera de la cancha?

–Pues un tipo normal como otro cualquiera. Me gusta divertirme, estar con mi familia y mis amigos. Disfrutar de la vida. Y me gusta componer música en mi tiempo libre, esa es una de mis mayores aficiones.

–De hecho tiene algún tema publicado. ¿Se ve haciendo carrera cuando acabe el baloncesto?

–¡No, no! Solo lo hago para divertirme, pero sin ninguna pretensión. Lo hago porque es algo que me hace disfrutar lo suficiente como para ponerme a ello. Realmente es algo que me emociona y me motiva. Ser creativo, estar en ese proceso y poder escuchar por primera vez una canción cuando la termino es algo muy divertido. Me encanta eso.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad