Perfil de Luis Rubiales

Hijo de alcalde y nieto de futbolista

Rubiales había escapado con más o menos erosión de cada uno de los conflictos previos, pero airoso para mantenerse en el cargo, a pesar de que sus detractores crecían como setas fuera de su entorno. La deriva actual empieza a salpicar todo.

Aunque naciera en Las Palmas, 'pació' en Motril y presume orgulloso de ello. Vuelve cada vez que puede donde quedan algunos de sus mejores recuerdos de infancia y juventud. Su padre fue alcalde de la ciudad costera y su abuelo, un futbolista que recaló allí procedente de Algeciras, quien se enamoró y decidió echar raíces en la vega del Guadalfeo. La pasión por este deporte es por tanto familiar y se contagia a una de sus hijas, Elena, que es jugadora. Hace unos meses, en un partido de su categoría, con diez años, lució el apellido y el dorsal de su padre, el 17, para apoyarlo durante una polémica que ya quedó añeja.

Lo contó emocionado el propio Rubiales en el programa 'Viajando a Chester'. Habló con devoción tanto de ella como de sus otras dos hijas: Lucía, que estudia Historia del Arte, «una tía muy sensible y con un compromiso consigo misma y con la sociedad», confesó al presentador Risto Mejide; y Ana, la mediana, «que es la que se parece más a mí y es quizás la más reivindicativa». Rubiales está divorciado de la madre de ellas, la abogada Manuela Delicado, pero en aquella emisión televisiva fue muy elogioso: «Creo que siempre hemos hecho un buen trabajo por ellas. No creo que fuera un fracaso (la ruptura), fuimos muy felices, pero cuando pasas a otras etapas, pues pasas».

Ya como directivo de la Federación, se le conoció una relación que levantó controversia. Se le acusó de llevar a la pintora mexicana Roberta Lobeira a un viaje a Nueva York con dinero de la federación. Le colgaron que inventó reuniones con la ONU y la Major League Soccer. Anteriormente también le reprocharon un caso de enchufismo con otra pareja, Brigit Tenorio, cuando era presidente de la AFE.

De todo salió hasta ahora, pero la actitud visceral con tintes machistas que mostró en Australia dejan tocado a este motrileño que dicen que es todo corazón y que nunca se aleja de familia y amigos. También apostó por personas granadinas de su confianza en la Federación. Entre otros, el director del área legal, Pedro González Segura. Queda bajo interrogantes qué sucedería en caso de cese de quien fue su valedor. Rubiales, que en muchas líneas ha hecho avanzar al fútbol español, sobre todo al modesto, se encuentra acorralado por una cuestión ajena a su gestión, pero censurable.