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José A. Gutiérrez
Domingo, 16 de marzo 2025, 20:40
Este Real Jaén parece no encontrar respuesta a la pregunta infinita. ¿Dónde está el límite de la crisis? ¿Dónde el suelo de la caída? Así, ... la historia parece repetirse con Manolo Herrero. Cambios de entrenador, de proyecto, pero el proceso entre la esperanza y el descalabro es cada vez más corto. Al inicio de la aventura de cada nuevo técnico, el milagro parece a punto de producirse; lo cierto es que, poco tiempo después, la aventura termina en catástrofe.
Ante el Motril el Real Jaén destiló un fútbol carente de brillantez, intensidad y lógica. Porque esta entidad siempre juega en el abismo existente entre la tristeza y la alegría. En este mundo del fútbol lo último siempre acaba pisoteando a lo anterior. Ylos blancos han pasado de depender de ellos mismos a volver a ver al líder, el Atlético Malagueño, a cinco puntos de distancia.
El Motril fue por convicción, juego, solidez y Toni, mucho mejor. Sobriedad futbolística y anímica para dar como resultado un bloque que despliega un juego equilibrado, inteligente y competitivo, de la mano de su técnico, el jienense, Manu del Moral. El exdelantero internacional jienense Manu del Moral fue nombrado a finales de enero entrenador del CF Motril, tras la destitución de Emilio Fajardo.
En el minuto 7, Javi Sánchez mandó a saque de esquina un lanzamiento lejano de Carmelo que buscaba la escuadra. El cancerbero local se golpeó con la madera en esta acción en la que salvó a su equipo. Diez minutos más tarde, un cabezazo de Carlos Fernández, tras centro medido de Adri Paz, se marchó fuera de la portería por centímetros. Fue la primera clara ocasión de los locales. Darío, en el minuto 20, adelantó a los motrileños. Centro de Migue Cobo desde la izquierda y Darío, llegando desde atrás, acierta a superar a Javi Sánchez.
El conjunto visitante siguió generando peligro. Obligando a Javi Sánchez a salvar el segundo tanto en el minuto 28. Sin necesitar dominar el esférico, los de Manu del Moral estaban generando mucho peligro con transiciones eléctricas y verticales. En el saque de esquina, el cancerbero local volvió a aparecer para negar el tanto del bloque motrileño tras un testarazo de Darío.
El empate pudo llegar en el minuto 32 en una doble ocasión de Curro primero y de Carlos Fernández, en el rechazo, que acabó repeliendo la madera del palo. A falta de cinco minutos para el descanso, un disparo seco de Óscar Lozano, desde la frontal, buscando el palo largo, no encontró el marco de la portería por poco.
Música de viento para los suyos desde las gradas. A la afición se la seduce ganando, eso no se discute. Pero el Real Jaén no jugó bien y por eso no encontró el mejor camino posible hacia el éxito. Ante un Motril muy cómodo y con las ideas claras. El Real Jaén excesivamente lento a la hora de atacar el sistema defensivo rival.
No apareció el jugador franquicia del Real Jaén, el motrileño, Óscar Lozano, y tampoco lo hizo en el segundo round. Un pelotero con una sabiduría integral, que lo eleva a la condición de maestro. Yque ejerce en un campo de acción amplio, imprime al juego la velocidad justa, pone los balones en los lugares en que sus compañeros lo desean; tiene habilidad, panorama, coordinación, potencia, generosidad, valentía..., pero ante el Motril estuvo ausente. Ysin Agus Alonso, sancionado, ni Mario Martos, lesionado, en la convocatoria el roto fue mucho mayor.
Movió sus piezas Manolo Herrero tras el descanso. Entró Juan Cámara en sustitución de Javi Moyano. Pero a los dos minutos, el Motril volvió a golpear por mediación de Toni. Encontró una autopista por su banda derecha. El Real Jaén acusó el golpe ante un Motril muy superior en el centro del terreno de juego.
Carlos Fernández se entretuvo en exceso cuando lo tenía todo a su favor para acortar distancias en el marcador. Intentaba reaccionar el Real Jaén con más corazón que fútbol.
El Motril ejerció un dominio tiránico por medio del balón. Y el público protestaba en la grada. Muy cómodo, circulando el esférico en las inmediaciones del área local, sin que los blancos lograran interrumpir el fútbol fluido de los de Manu del Moral, fruto de una depurada técnica individual de sus peloteros. Al Real Jaén le duraba un suspiro el balón. Incapaz de elaborar sus acciones ofensivas. Perfecto el trabajo de destrucción motrileño.
Herrero intentó modificar lo que estaba sucediendo sobre el verde en el minuto 62. Entraron Álvaro Muñiz y Dalton por Adri y Migue García. Pero como el partido necesitaba una revolución, y no pasaba nada, en el 68 Herrero apostó por dar entrada a Fernando y Awusi por Espín y Carlos Fernández.
La esperanza llegó en el 73. Tras una acción de Dalton por la derecha en la que el esférico le cayó, consecuencia de un rechazo, a Awusi, que estuvo mucho más vivo a la hora de llegar al esférico en la frontal de área y su disparo fue un misil que acabó en la red. Un canto a la esperanza que se difuminó muy pronto.
Si alguien soñaba con vivir una recta final del partido épica, la tradicional mala-malísima salud de hierro del Real Jaén, y su pésima fortuna, le hizo despertar de golpe.
Porque Awusi quiso jugar hacia atrás con la cabeza, tras un saque en largo de Oliveira, y acabó introduciéndose el esférico en su propia portería. Quedó demostrado que en el Real Jaén cuando algo puede ir mal, empeorará. Ypudo ser peor. En el descuento, Javi Pérez desvió un disparo cruzado que amenazaba con ser el cuarto. Eincluso ganó un mano a mano a Raúl García.
Migue García reconoció que «l equipo no ha estado a la altura. Nos ha costado generar ocasiones de gol, ellos han estado mucho mejor». YJuan Cámara explicó que «nada más empezar la segunda parte encajamos el segundo gol. Era un partido complicado y con ese gol se puso mucho más difícil. Todavía quedan bastantes partidos para remontar. Y si no es en el ascenso directo lo intentaremos en el 'play off'».
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