Edición

Borrar
El pequeño Samuel, a bordo de su silla de ruedas durante el memorial con su familia. Blanca Rodríguez

Carreras populares en Granada

El ejemplo de Samuel honra la Padre Marcelino

El chico de doce años y con una enfermedad ultrarrara completa el memorial en silla de ruedas junto a más de 4.000 personas

Domingo, 6 de abril 2025, 14:17

Samuel corre más rápido que cualquier contratiempo. Así lo demostró al cruzar la meta del memorial Padre Marcelino sobre su silla de ruedas. Este pequeño de doce años tiene una enfermedad ultrarrara que limita sobremanera sus capacidades cognitiva y motriz, pero que no impidió su participación entre las más de 4.000 personas que honraron el deporte en Granada. Todo un ejemplo de superación que vale mucho más que cualquier medalla.

El Padre Marcelino estaría orgulloso. Cerca de veinte años después desde el día de su fallecimiento, su espíritu continúa presente en la ciudad bajo sus dos principios fundamentales: familia y deporte. Sobre todo, en el barrio que abraza al Colegio Santo Tomás de Villanueva. Hasta allí se desplazó Samuel con la ayuda de sus familiares y amigos, los implicados en una causa desconocida a la par que justa.

«Salimos a correr juntos con el fin de visibilizar la paraparesia espástica del tipo 52 (SPG52). Se trata de una enfermedad genética diagnosticada tan solo en tres personas en España. Una de ellas es mi hijo, que empezó a experimentar el deterioro a los seis años», informó Paco, su progenitor, a IDEAL. Así nació hace dos años la asociación Corro por Marina y Samuel, que se involucra en proyectos deportivos para fomentar la investigación sanitaria de la SGP52.

La familia Cortés Ruiz, el descalzo Víctor y otros corredores de la Padre Marcelino. Blanca Rodríguez/Á. M.
Imagen principal - La familia Cortés Ruiz, el descalzo Víctor y otros corredores de la Padre Marcelino.
Imagen secundaria 1 - La familia Cortés Ruiz, el descalzo Víctor y otros corredores de la Padre Marcelino.
Imagen secundaria 2 - La familia Cortés Ruiz, el descalzo Víctor y otros corredores de la Padre Marcelino.

«Marina era la prima hermana de Samuel, que murió el año pasado a causa de otra enfermedad desconocida. La carrera del Padre Marcelino era la suya, siempre participaba con nosotros. Esta edición la hemos querido recordar junto con Samuel, que ha disfrutado mucho. Llevaba toda la semana deseando salir a correr», añadió el padre junto a Samuel, tío del pequeño.

Su verde esperanza destacó entre el rojo oficial, que coloreó la gran marea de corredores que invadió el distrito Ronda desde primera hora. A falta de varias horas para el pistoletazo inicial, algunos ya calentaban a lo largo de la calle Arabial. «El objetivo pasa por completar el recorrido, no aspiramos a más», reveló sincero Antonio junto a tres de sus hermanos.

Todos antiguos estudiantes de los Agustinos, afrontaron los 10.000 metros con gallardía entre los ánimos de su familia. «Recordamos al Padre Marcelino, una persona muy especial para el barrio. Era un amigo, no solamente un profesor», detalló la matriarca María Isabel. Al otro lado de la calle estiraba Víctor, completamente descalzo. «Las zapatillas provocan daño al pie. Prefiero correr al natural. He aprendido a hacerlo sin apoyar el talón. Además, me ayuda con una lesión en la columna», afirmó. Todo vale, pero el deporte es innegociable.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

ideal El ejemplo de Samuel honra la Padre Marcelino