Ciclismo

El granadino Carlos Rodríguez vence en la etapa reina del Tour de Francia

La etapa fue una auténtica locura desde el inicio. Una caída en la que el propio Hindley y una veintena de corredores se vieron implicados obligó a la organización de la carrera a detener la marcha para atender bien a todos los corredores. Hindley continuó sin aparentes problemas, pero el Jumbo Visma, equipo de Vingegaard, imprimió un ritmo infernal a la carrera que provocó que no se pudiera conformar ninguna fuga por delante del pelotón. Carlos Rodríguez, mientras tanto, aguantó sin hacer ruido dentro del grupo, consciente de que una marcha constante le favorecía para que la carrera se rompiera en la subida al último puerto de la jornada, el Joux Plane.

Ahí los dos gigantes de este Tour de Francia, Vingegaard y Pogacar, elevaron el ritmo de la carrera y Hindley no tardó en ceder. Carlos Rodríguez se quedó unos minutos después, pero la gasolina del sexitano era mucho mayor. El esloveno y el danés coronaron en primer lugar el Joux Plane, pero Carlos Rodríguez se benefició de su excesivo marcaje y cuando los alcanzó en el inicio de la bajada no se pensó el continuar y comenzó un frenético descenso, muy técnico y peligroso, en el que se jugó todas las opciones que tenía de abrazar la etapa.

Vingegaard y Pogacar venían a escasos cinco segundos del granadino, pero el reparto de bonificaciones en meta provocó que ambos volvieran a mirarse para jugarse la segunda plaza. Carlos Rodríguez mientras tanto apretaba los dientes para alcanzar la línea de meta de Morzine y ganar su primera etapa del Tour de Francia.