Nuria Párrizas quiere ganar un WTA 250 en 2023

No obstante, la granadina piensa que «debo mejorar algunos aspectos tenísticos, aunque preferiría no decir cuales para no dar pista a mis rivales, je, je». La jugadora, que recibió el premio a la mejor deportista femenina absoluta de Granada en la pasada Gala del Deporte de la Asociación Española de la Prensa Deportiva, celebrada en Baza, explica que le gustaría «sobre todo, ser más regular durante todo el año».

La meta más ambiciosa para la temporada la centra en «ganar un torneo WTA de la categoría 250» y, también, como objetivos destacados, «pasar más rondas en los grand slam», dado que fijó el inicio, como es costumbre, con el Abierto de Australia de enero. De hecho, estuvo en Granada durante los últimos días del año para prepararse y viajar a las Antípodas justo después de la Nochebuena, para así ultimar en pista dura, con varios torneos previos, el grand slam australiano.

«Básicamente, voy a intentar ser mejor y progresar en 2023 un poco en cada cosa, con respecto al año pasado, aunque creo que todavía tengo mucho margen de mejora en todos los aspectos del juego»: el saque, la derecha, el revés o los movimientos en la red y la volea, también en táctica y estrategia, que son fundamentales en el tenis.

Entre las conclusiones técnicas que Nuria Párrizas advierte, la jugadora, que tuvo como uno de los alicientes en la campaña recién terminada su presencia con la selección española en la Copa Billie Jean King (antes llamada Copa Federación), matiza que «sé dónde quiero estar y, también, sé que lo voy a hacer, me esforzaré para ello».

En cuanto al circuito WTA, la nazarí puntualiza que «sobre el ránking prefiero guardármelo, es una impresión interna mía, sinceramente, entiendo que el año pasado me obsesioné demasiado con él y en conseguir determinado puesto, en un número, y con eso me perjudiqué a mi misma».

Quizá haya aprendido que el ránking no es lo más importante, o que mirar por mantenerse muy arriba le ocasiona una presión añadida que perjudica a su juego, ese tema mental lo desea corregir y superar en 2023, un año que se le presenta con panorama fresco y renovado, además de que cambió de entrenador, y ahora está dirigida por José Antonio Sánchez de Luna, el lojeño fue su primer técnico y, además de que forma a los grandes jugadores locales en el Campus Tenis Club Granada, ayuda al profesional Pablo Carreño. Relevó al exjugador Carlos Boluda.

La progresión en la faceta física, donde Párrizas se encuentra más fuerte y rápida de piernas para la competición en la élite, está en manos de Pedro Franco, que también forma parte del equipo técnico de su paisano Roberto Carballés.

«He jugado torneos más grandes en 2022, también tuve derrotas más duras, no fue tanto como me hubiera gustado, pero el año fue positivo, aposté por jugar todos los importantes, antes ganaba más partidos por jugar muchos pequeños, siempre te preocupa el ránking pero, sinceramente, creo que me perjudicó más que ayudarme, es mejor centrarme en mi juego. El cambio de entrenador me viene muy bien, tengo mucha confianza y ayuda con José Antonio Sánchez, nos entendemos, existen muchas ganas en el nuevo proyecto. Hay enorme margen de mejora, buscaré cuadros finales», comenta Párrizas.

José Antonio Sánchez de Luna, por su parte, apunta que «nos pusimos de acuerdo y estoy encantado de ayudarle, de siempre, ahora está en un puesto alto a nivel internacional, tendremos colaboración de otros entrenadores externos para compaginar los viajes, yo le acompaño a Australia. He tenido contacto habitual con Nuria, cuando vino a entrenar al Campus, hemos coincidido también fuera de Granada, ha madurado a nivel personal y profesional, no me ha sorprendido dónde está porque siempre tuvo talento, calidad y nivel, se puede mejorar, claro, ella necesita su tenis agresivo, ir a ganar el punto, que sea la que mande, estar más rápida, trabajar en la línea y no esperar el fallo de la rival».

Con respecto al calendario 2023, está definido el primer trimestre. «Empezamos en Australia, ahí vamos juntos, nos alternaremos los preparadores y por eso estamos completando el equipo, ya hemos hablado con algún técnico de Sevilla, luego habrá torneos por Europa para preparar la gira americana, Indian Wells y Miami, para después ultimar la tierra batida. Iniciamos la campaña en Sidney, con la United Cup, torneo nuevo mixto por equipos, que jugamos con Paula Badosa, Carreño y Nadal, y más tarde el WTA 250 de Tasmania».

La temporada de Párrizas ya ha dado comienzo precisamente en la United Cup, donde no se han producido noticias positivas. La granadina ha caído este sábado frente a la británica Katie Swan (número 145 del mundo) por 3-6, 6-1 y 6-2. Junto a la también caída de Rafa Nadal contra Cameron Norrie por 3-6, 6-3 y 6-4, España ha perdido los dos primeros puntos ante Reino Unido en su cruce del grupo D de la United Cup.

Por último, Sánchez de Luna estima que «el objetivo se dará poco a poco, que sea más completa y obtenga confianza en ella es lo principal, sin mirar tanto los resultados, estaremos más centrados a nivel personal».