Placas solares en Granada

Freno a la demanda de placas solares en Granada

El presidente de la Asociación de Instaladores eléctricos y Telecomunicaciones de Granada, Juanma Plata, también gerente de Montajes Eléctricos Hermanos Plata, analiza la situación actual de las fotovoltaicas y cree que los años de locura han pasado. Calcula que la actividad de estas empresas ha podido reducirse en el último año entre un cuarenta y un cincuenta por ciento, con respecto a los picos máximos de actividad. ¿Han cerrado esas empresas? La respuesta es no. ¿Por qué? Han apostado por la innovación y más allá de las instalaciones de las placas solares se han transformado en empresas de servicios energéticos. No se centran solo en la colocación de las placas, han desarrollado una oferta de venta total del producto que conlleva actuaciones más amplias, que en ocasiones termina con inversión cero en los paneles.

En el camino de la innovación en estos últimos años en la energía renovable, los empresarios no se han cruzado de brazos. Han impulsado las comunidades energéticas y el autoconsumo compartido. Otra de las revelaciones ha sido la batería virtual para llevar un 'control' de la energía que se produce y poder utilizar ese excedente cuando se requiere (por ejemplo en la noche, días nublados, entre otros escenarios). Esta modalidad hace posible en algunos casos el coste cero en la factura.

A este crisol de situaciones hay que sumar ejemplos de gran éxito que no han visto mermada su actividad, todo lo contrario. Es el caso de la compañía granadina líder en renovables Greening Group, especialista en instalaciones de autoconsumo fotovoltaico para las empresas y una de las tres más importantes del país en este campo.

La compañía, que nació como spinoff de la Universidad de Granada, debutaba justo hace un año en el BME Growth, el mercado de valores español orientado a pymes en expansión, con una valoración de 143 millones de euros. Ahora acaban de publicar los resultados de su primer ejercicio completo tras la salida a Bolsa, con un beneficio de 3,49 millones de euros en 2023, lo que representa un incremento del 56% con respecto al ejercicio anterior. El resultado bruto de explotación (Ebitda) consolidado del grupo de renovables ascendió 10,2 millones de euros en 2023, lo que supone multiplicar por tres el resultado operativo bruto alcanzado en el ejercicio 2022. La compañía destacó que ha superado su plan de negocio previsto para el pasado ejercicio, tanto en crecimiento, como en rentabilidad y cartera de inversión, incluido en su plan de negocio 2023-2025.

Una de las aristas ampliamente analizadas en el sector es el consumo. Hay que reseñar que Granada es la tercera provincia de Andalucía con mayor potencia renovable instalada, tras Sevilla y Cádiz, al contar al cierre del ejercicio 2023 con 1.268 megavatios (MW) verdes y concentrar el 11% de la potencia renovable de la región. Un despliegue de energías verdes que ha tenido un avance considerable en el autoconsumo de ciudadanos y empresas, ya que este se ha multiplicado por 65 en la provincia granadina en los últimos cinco años.

En este punto, Plata puntualiza que hay actores del tejido empresarial e instituciones que requieren para su actividad de más consumo eléctrico que ya cuentan con este sistema fotovoltaico de energía verde.

No obstante, la actividad sigue y hay datos alentadores. En marzo, la Junta de Andalucía informó que de los más de 1.000 expedientes de proyectos de energías renovables que se encontraban en tramitación en Andalucía, 143 se localizan en esta provincia, sumando una potencia de 2.383 MW. De culminarse todos con éxito, supondrían una inversión de 2.620 millones y un empleo previsto cercano a los 5.500 puestos de trabajo en la fase de construcción.

En la actualidad hay diferentes programas abiertos como es el de incentivos para instalaciones de energías renovables térmicas. La Agencia Andaluza de la Energía publicó la convocatoria del citado programa financiado por la Unión Europea con fondos NextGeneration en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. La vigencia del programa se ha ampliado hasta el 31 de julio de 2024.

Según reza en la convocatoria, las actuaciones subvencionables en este programa de ayudas tienen como objetivo la mejora de la eficiencia energética y la calidad del aire de las ciudades, la promoción y el uso de energías alternativas, así como la diversificación de las fuentes de energía usadas en la producción energética fomentando el despliegue de sistemas térmicos renovables en los sectores de la economía, contribuyendo a la consecución del objetivo de descarbonización a la par que consolidan su competitividad en el mercado. Otro de los programas que está en vigor es el nacional de eficiencia para pyme y gran empresa 2019-2020, que comprende incentivos para actuaciones de eficiencia energética en compañías con estas categorías de pyme o gran empresa. Dotado con 121,7 millones de euros del Fondo Nacional de Eficiencia Energética, el plazo de solicitud de ayudas se ha ampliado hasta el 30 de junio de 2024.

En la radiografía del momento por el que pasa el sector, según la Asociación de instaladores, hay otro aspectos determinante y es la falta de profesionales cualificados. Llevan tiempo con esta rémora y han dado paso para encontrar trabajadores, pero no hay profesionales suficientes. El relevo generacional está siendo duro, según el presidente de la Asociación de Instaladores eléctricos y Telecomunicaciones. Advierte, además, que esta situación tiene incidencia en las pymes que están a un nivel mínimo de productividad y de empleados. «Las empresas podrían crecer más si tuvieran más profesionales», advierte Plata, evidenciando las necesidades del sector.

Las asociaciones de instaladores de Granada son dos organizaciones empresariales que representan, en la provincia, a los sectores de la electricidad, fontanería y saneamiento, climatización, gas, frío industrial, telecomunicaciones, protección contra incendios y energías renovables. La integran en la actualidad unos quinientos negocios. Plata calcula que emplean a unas tres mil personas, aproximadamente. En el sector podrían estar trabajando, contando las empresas que no están en la asociación, unas ocho mil personas. Y hacen falta más. En este extremo apunta que están estudiando qué empresas no están asociadas y que sea posible que lo hagan.

Están cubriendo parte de la demanda con gente de otros países. Desde la asociación profesional se han volcado en acciones como la formación dual para poder contratar más profesionales. Requieren de mano de obra para la mayoría de subsectores.