La casa prefabricada con dos habitaciones que ya viene amueblada por 35.000 euros

El elevado coste de las viviendas en España está haciendo que sean muchos los que busquen alternativas económicas y las casas prefabricadas van ganando terreno. Sus precios reducidos, rapidez de entrega y variedad de diseños las hace una opción cada vez más elegida por los compradores.

Existen, además, soluciones que ofrecen estas viviendas ya hechas incluso amuebladas, con lo cual se eliminan aún más barreras y tiempo. Para aquellos que buscan algo así existe en el mercado una opción, la casa prefabricada Lucky del fabricante alicantino Alucasa. Es una de sus viviendas de la gama vacacional que tiene todo lo necesario para hacer la vida fácil a sus habitantes, y que es ideal tanto como vivienda habitual como para segundas residencias.

Es lo que conoce 'mobile home', es decir, que es un bien mueble, algo que habrá que tener en cuenta a la hora de solicitar los permisos en el ayuntamiento antes de su instalación.

La casa prefabricada destaca por su precio, 35.240 euros. De estilo sencillo pero versátil, cuenta con opciones de personalización que van desde el clásico blanco hasta colores más atrevidos como rosa o azul. El gran ventanal en la fachada proporciona espacios en el interior llenos de luz.

La distribución es la siguiente:

Salón de la casa prefabricada: Su distribución prioriza las zonas comunes, como el salón-cocina, que cuenta zona de descanso, espacio para comer y cocina equipada con frigorífico, vitrocerámica de dos fuegos y campana extractora.

Dormitorios: Dispone además de dos dormitorios, el principal con una cama de 135x190 cm, mesitas de noche y un armario, mientras que el segundo dormitorio tiene dos camas individuales, también con armario incluido.

El baño ofrece una cabina de ducha compacta con mampara hermética y griferías de ahorro de agua. Todas las estancias incluyen iluminación LED.

Hay que tener en cuenta que el precio de la vivienda no lleva incluido el transporte de la misma ni el montaje, y es que este varía en función de la ubicación y el estado del terreno. Este último, para evitar desnivelaciones de la vivienda, debe estar lo más aplanado posible, por lo que es en muchos casos será necesario compactar el suelo o preparar una base de hormigón.

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