Seguridad Social

Los dos conceptos que tienes que revisar en la nómina para saber si cobras lo que te corresponde

La nómina justifica las contrapartidas que la empresa da por trabajar y que se pueden necesitas para situaciones como pedir un préstamo o alquilar una casa, pasando por conocer determinados derechos que vas adquiriendo, como el de cobrar una pensión en el futuro.

El salario base es el corazón del total de remuneraciones o devengos que recibes por tu trabajo y no puede ser inferior al mínimo que marque tu convenio para tu categoría o grupo profesional (que también figura en la nómina). Si no hay convenio aplicable, entonces debe ser, al menos, igual al salario mínimo interprofesional o SMI. Por ello, es importante comprobar la antigüedad y el grupo de cotización.

En el caso del grupo al que se pertenezca, cada uno va a tener una base de cotización determinada, que viene establecida en el convenio colectivo que corresponda a la actividad laboral. Cada grupo y base de cotización reglada por ley se puede consultar en la página de la Seguridad Social.

Cada cierto número de años el salario se podrá incrementar gracias al complemento por antigüedad, que se calcula tomando de referencia el salario base. La fecha de alta del contrato no tiene que figurar obligatoriamente en la nómina, pero se puede consultar en el contrato. Hay que prestar una atención especial a la nómina cuando tu antigüedad complete una unidad (trienio, quinquenio...).

También se puede consultar la antigüedad accediendo al área personal de la Seguridad Social y ver la vida laboral y la bases de cotización. En el apartado Tu vida laboral, están los períodos de alta y baja en la Seguridad Social, las empresas en las que se ha trabajado, actividad como autónomo y el número de días de estado en alta.