Este cuento se acabó

España se jugará hoy frente a Corea del Sur -quien lo iba a decir- el pase a la fase final de este Mundial. Pero aunque se produzca la victoria ante los asiáticos, la derrota contra Croacia (32-22) y la del lunes frente a Suecia -los dos equipos ya clasificados- le hará pasar a la segunda fase sin puntos, lo que le aleja de cualquier opción de podio.

La selección española estuvo fuera del partido desde el mismo pitido inicial.

Cuatro pérdidas de balón en ataque y tres lanzamientos fallidos desde los seis metros en tan sólo diez minutos es dar demasiada ventaja a una selección con la categoría demoledora de los croatas. El 2-6 que señalaba el marcador en ese instante sonaba ya a decisivo.

Cambios de Rivera

A partir de ahí, urgencias y precipitación que provocaron un rosario de errores y un bloqueo total de ideas que les impidió, incluso, aprovechar las múltiples ocasiones de superioridad de que dispusieron.

Desde el banquillo español se intentó todo. En defensa se comenzó con un adelantado -un suicidio por la movilidad de Duvnjak-, se pasó a un 3-2-1 -nos machacaron Metlicic y Lackovic desde los laterales- para acabar en un 6-0 conservador y más efectivo.

Entrada de Perales

Delante se mejoró un poco con la entrada al central de Perales, que dio un poco más de movilidad al equipo, pero Entrerríos tiró mucho y mal, Ruesga falló los primeros disparos y no le dieron muchas más oportunidades, a Romero le cogieron pronto la medida los defensas croatas y todos los extremos estuvieron desaparecidos en combate.

La falta de efectividad bajo los palos por parte de Hombrados y Barrufet impidió que se pudiesen lanzar los contragolpes de los que tanto quería vivir el equipo español.