
ANDRÉS CÁRDENAS
Miércoles, 7 de octubre 2009, 17:11
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Gabriel Medina Vílchez, un investigador motrileño apasionado por el marketing, ha descubierto que los piononos que se atribuyen como invención de Ceferino Isla en 1897, se vendían en Madrid, procedentes de Cádiz, nada menos que 40 años antes de esa fecha. E incluso da fe de una gran polémica que se originó en Madrid debido a su nombre.
Según se ha difundido extensamente, Ceferino Isla, muy devoto de la Virgen de las Angustias, fue el que creó en 1897 este exquisito dulce porque quería rendir un homenaje al Papa que había proclamado el dogma de la Inmaculada Concepción de María, que no era otro que Pio IX o Pío Nono. Sin embargo, según Medina, esos dulces ya existían en 1857 y fueron creados en Andalucía, pero no en Santa Fe, sino en la llamada Tacita de plata. "Vaya por delante que no quiero restar la importancia que tiene la familia Isla en haber conseguido guardar la tradición durante tanto tiempo, pero sí es cierto que la historia está para ser contada y la verdad es que los piononos no se crearon en Santa Fe, sino en Cádiz", dice el investigador.
Granadablogs: ¿Qué aprendemos del nuevo orígen del Pionono? La conclusión a un click
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