AIDA ORTIZ
Viernes, 9 de marzo 2012, 18:08
María, la jerezana, se ha convertido en la séptima expulsada de Gran Hermano 12+1 , en la gala del pasado jueves. La guapa andaluza estaba nominada junto a Juan, el cura motero, y Noemí. La audiencia decidió salvar a Juan y a la tinerfeña y expulsó a María con un 60,2 por ciento de los votos.
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Una vez expulsada, María viajó hasta el plató de Gran Hermano 12+1 para enfrentarse a la tensa entrevista de Mercedes Milá. La presentadora fue directa al tema que ha calentado el ambiente desde que la jerezana entró en la casa: Hugo. Mercedes Milá le dijo que tenía marcado el número de Julia, la novia de Hugo , por si quería hablar con ella.
La respuesta de María era evidente, no quiso hablar con Julia y, además, aseguró que no se arrepentía de nada porque había hecho en cada momento lo que le apetecía. Tanto Hugo como yo sentimos un cariño especial, dijo María a la presentadora. Milá, intentando sonsacar un atisbo de arrepentimiento, le dijo que a Julia no le ha gustado nada lo ocurrido con su novio en la casa, a lo que la ex concursante respondió a mí sí.
Pero la despedida de sus compañeros fue, quizá, el momento más tenso de la noche. Y es que Hugo, a quien María le dedicó una cariñosa despedida, no supo cómo reaccionar y se mostró frío y lejano. La guinda del pastel la puso Noemí, que metió el dedo en la llaga al despedirse de María. Yo te cuido al papito, cuida tú de Julia, dijo dejando a María sin palabras.
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