José Ramón Villalba
Lunes, 10 de octubre 2016, 10:12
Cayó desplomado en la misma puerta de una cueva del Barranco del Abogado. Esta fue la tarjeta de presentación dejada ayer por la víctima de un apuñalamiento, quien tras recibir, al menos, dos navajazos, uno en el pecho y otro en el costado, decidió huir en busca de auxilio.
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El inquilino de una de las cuevas del Barranco del Abogado, concretamente una situada a la derecha tras el segundo puente de la carretera del nuevo acceso a la Alhambra, fue quien avisó a los servicios de emergencia después de que la víctima del apuñalamiento se hubiera desplomado justo delante de su morada. Apenas pasaban unos minutos de las diez de la mañana, cuando un dispositivo sanitario, Policía Local y Policía Nacional se desplazaron al lugar de los hechos.
Fuentes de la delegación provincial de Salud han explicado a Efe que la víctima ha recibido ya el alta médica después de ser asistido de dos heridas por arma blanca.
Antecedentes penales
Los agentes iniciaron sus labores de investigación y las primeras pesquisas les condujeron a otra cueva, ubicada 200 metros más abajo del lugar donde encontraron a la víctima, allí vive una mujer, expareja del apuñalado, detenida por los agentes como presunta autora de los hechos.
Ambos, agresor y víctima, superan la treintena de años y tienen antecedentes penales.
La Policía Nacional ha detallado además que el hombre permanece también detenido por saltarse en el momento de los hechos la orden de alejamiento en vigor de su expareja, que lo había denunciado por violencia de género.
La detenida ha pasado esta mañana a disposición del juzgado de guardia que determinará si toma alguna medida cautelar y si le imputa algún delito.
Una de las hipótesis, sólo es una hipótesis y hace falta demostrar su veracidad, es que la mujer podría haber actuado en defensa propia para evitar algún tipo de agresión. A la víctima aún no le han podido tomar declaración para saber cuál es su versión.
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La presunta autora del apuñalamiento estaba instalada en una chabola fabricada con paneles metálicos, maderas y telas. El techo eran chapas y trozos de tela de una sombrilla. Allí residía desde hacía unos meses, según comunicó a IDEAL un individuo que dijo conocerla y que se encontraba en la zona de cuevas donde sucedieron los hechos.
Ladera
En este entorno pueden existir unas quince cuevas y chabolas habitadas, aprovechando la ladera que baja desde el Cementerio de San José hacia el Barranco del Abogado. La Policía Nacional halló el cuerpo sin vida de un indigente en septiembre del pasado año en la misma zona.
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Los agentes buscaron la navaja o el cuchillo supuestamente utilizado para el apuñalamiento por el entorno de esta chabola, como prueba material del delito, y en principio no ha trascendido que lo hayan encontrado. Pasadas las 12.30 horas de ayer, y después de que la Policía Científica abandonara la zona, la vida nómada de los habitantes de las cuevas del Barranco del Abogado volvió a su rutina diaria como si allí no hubiera pasado nada.
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