Agresión sexual en Granada

Investigan una violación a una menor en un pueblo de Granada

Los dos coincidieron en una fiesta de carnaval en un municipio de la provincia. Agresor y víctima iban con sus amigos para disfrutar del carnaval. Los dos se encontraron, hablaron, y testigos señalaron que también discutieron, y desaparecieron. Todo ocurrió el sábado por la noche.

La víctima, junto a sus amigas, acudió en busca de una patrulla de la Policía Local del municipio donde ocurrieron los hechos el pasado sábado a las diez de la noche. La adolescente iba destrozada y con una camiseta ensangrentada. Los agentes actuantes escucharon la versión de las amigas y la de la víctima, y en primer lugar facilitaron la protección oportuna a la menor con la ayuda de Cruz Roja, que disponía de un dispositivo sanitario en la zona. Guardia Civil se personó en la zona a la par que los padres de la menor se desplazaron a la localidad granadina donde sucedieron estos hechos.

La misma patrulla de la Policía Local actuante logró identificar al acusado, quien se había dado a la fuga después de la supuesta violación.

Los agentes del instituto armado son quienes se han hecho cargo del caso después de lo ocurrido la noche del sábado y la madrugada del domingo. Fiscalía de Menores está pendiente de tomarle declaración al chico, identificado por la denunciante, para conocer su versión de los hechos y pasarle la instrucción del caso al juez de Menores competente para que decida qué hacer.

De momento, la menor ha sido sometida a un informe forense para corroborar la declaración efectuada en primera instancia por la víctima de este suceso. La agredida portaba una camiseta con sangre cuando acudió a denunciar los hechos y, al parecer, en la caseta donde ocurrieron los hechos había sangre también.

Respecto al joven identificado, cuando la Fiscalía de Menores le llame a declarar deberá hacerlo en presencia de su abogado y de sus padres al tratarse de un menor de edad. En función de las pruebas practicadas, del atestado policial y del testimonio de la víctima y el agresor, el juez decidirá qué hacer con el menor de edad.

La menor tuvo que ser atendida también de una crisis de ansiedad debido al estado de nerviosismo que presentaba cuando acudió a pedir ayuda junto con sus amigas poco después de consumarse la presunta violación el pasado sábado.